Sumas, restas, multiplicaciones y divisiones y las cuentas nada más no salen.
La cruda realidad del día a día de una familia de bajos recursos económicos, sobretodo por los raquíticos sueldos que se pagan -salario mínimo-, en maquiladoras y otros negocios de todo tipo, como zapaterías, tortillerías, panaderías, restaurantes, ferreteras, refaccionarias, etc.
La luz, el agua potable y drenaje, el gas doméstico, la gasolina, el predial sin contar el cable o el internet se llevan cerca del 40 por ciento del ingreso familiar.
Súmele colegiaturas, uniformes, útiles y aportaciones para un sinfín de celebraciones en las escuelas.
El recibo de energía eléctrica se cubre regularmente con un aproximado de 500 pesos (por dos meses), sin clima, para el agua hay que desembolsar 200 pesos por mes, el gas son 370 cada tres mes por relleno de tanque mediano, de la gasolina ni hablar de mil 500 y hasta 2 mil por mes para llevar y recoger a los niños de la escuelas e ir al trabajo, y eso con un motor de 4 cilindros.
Las comunicaciones las cubren con celulares por los cuales pagan 150 pesos mensuales para en caso de emergencia y poder ver las alertas de riesgo en el internet.
Según el Inegi el promedio de gasto mensual por familia es de 2 mil 670.
Los gastos varían según la zona donde habiten las familias.