Fiel a su forma de ser, el comediante Polo Polo aseguró que así como es en el escenario es en la vida real, “no me tomo absolutamente nada en serio, porque las cosas cuando tienen que venir, van a venir”.
Posiblemente sea por esa misma filosofía que toma tranquilamente su padecimiento cardiaco, que lo llevó a ser intervenido quirúrgicamente para colocarle un marcapasos el año pasado. “Fui al médico porque me estaba doliendo una rodilla, tuve que hacerme un electrocardiograma y se vieron cosas que no estaba tan bien”.
El comediante explicó que la operación a la que se sometió en el Hospital ABC no duró más de hora y media, “son unos médicos impresionantes, fue un trabajo maravilloso, y desde ese momento traigo una máquina aquí, que me va a durar, si les vivo, 10 años más. No se siente nada, tengo que agradecerle a la tecnología, se me hace maravilloso”.
No sólo agradece estar bien de salud, sino también el seguir haciendo lo que más ama desde hace 40 años, hacer reír a la gente, materia en la que aún no le han podido hacer sombra las nuevas generaciones de comediantes por una razón que él considera fundamental, hacer las cosas bien, “con mucho cariño, con muchos hue...”. (México, D.F.)