Gracias a que el juez octavo de distrito privilegió el derecho de una jovencita a estudiar, es que se siembra un precedente para que alumnos con excelentes promedios puedan ingresar a los planteles que más se acomoden a sus necesidades.
El abogado y primer sindico municipal, Alfredo Castro Olguín destacó que la escuela Secundaria General número 9, Gabriel Saldivar y Silva, tendrá que recibir el próximo ciclo escolar a una alumna cuyo promedio educativo es de 9.7.
“La niña cumplió con todos los requisitos administrativos, le dijeron que regresara al día siguiente, se presentan y le informa un maestro que no había quedado, que estaban ocupado los 160 lugares para primer grado”.
Sin haber una orden o determinación por escrito de parte de la directora del plantel, se solicitó dijo, un amparo.
“La apoye legalmente y en el juzgado octavo de distrito,
se le requirió a la directora su informe por escrito, argumentó que no había dado aviso por escrito pero expuso que tenía completo su lugar”.
Otro de los motivos por los cuales la directora negaba el acceso a la alumna, explicó, es porque el plantel se encontraba retirado del hogar de la menor.
“El juez determino concederle el amparo y ordenó la protección de la justicia federal para efecto de que la inscribieran y que pudiera cursar el primer grado”.
Esto aseguró, siembra un precedente porque deben respetarse los derechos de lo niños.
“Se debe informar el porque no tienen cupo no solo despacharlos y que se las arreglara como fuera. Es importante que podamos haber logrado que esta niña pueda tener un espacio. Le acaban de notificar a la directora que deben pasar diez días hábiles para que pueda tener firmeza esta sentencia y sea ejecutada en el momento oportuno”.