Acompañado de su fiel compañera, trata de obtener alimento, ya sea para su casa o para venta, aunque se encuentre en un canal donde el agua no es limpia.
La fiel compañera es la red y su cubeta, en donde guarda los peces que obtiene luego de algún tiempo parado y esperando atrapar a su presa.
Comúnmente se pueden observar a personas que acuden al canal Anzaldúas para poder pescar y obtener alimento. Los hombres se paran en el puente vehicular, en la banqueta, donde colocan sus utensilios y se preparan a esperar pacientemente.
Nadie sabe si los pescados que obtienen, son para alimentar a la familia o se venden en la vía pública o entre vecinos, por lo que representa un riesgo en general.
Las autoridades de COEPRIS ha exhortado en varias ocasiones a que se compre en lugares establecidos y que revise a la hora de comprar para evitar enfermedades, sobre todo en la temporada de semana santa que se avecina.