Río Bravo
Exponiendo su integridad física menores entre los 5 y 7 años de edad, algunos por necesidad y otros son obligados prácticamente a ejercer la mendicidad en pleno centro de la ciudad, que es un tanto disfrazada limpiando vidrios, espejos o malabareando con naranjas, sin que hasta el momento autoridad alguna tome cartas en el asunto.
Es muy común ver en plena avenida principal entre ellas por la Francisco I. Madero como a tan corta edad se atraviesan entre los coches, lo mismo pidiendo el peso que limpiando el retrovisor.
Como Juanito con apenas 6 años de edad, dice que a él en su caso lo hace por necesidad porque solamente tiene a su mamá y no hay quien les de dinero, por eso aunque aseguró que está en la escuela, son los fines de semana sobre todo cuando se sale a las calles a ganarse la vida.