Puebla, Puebla.
Los pingos no tuvieron la paciencia ni la contundencia para hacer diabluras y sus propios errores los llevaron a sufrir su primera derrota del Apertura 2018, al caer 2-1 ante el Puebla.
El equipo de La Franja se repuso de la goleada 3-0 que le metió Cruz Azul hace ocho días en el Azteca para ganar por primera vez en el certamen.
En el amanecer del encuentro, los Diablos se crearon su propio infierno. El reloj todavía no marcaba un cuarto de hora de juego y Carlos Andrés Calvo le dio un antebrazazo al estilo de la lucha libre a Cristian Tabó para que Daniel Arreola le diera la primera felicidad a los poblanos.
Cuando los rojos se habían repuesto del mazazo tempranero, Francisco “Gringo” Torres sacó un zapatazo que lo único que encontró fue la red.
Todo era coser y cantar para los de casa, cuando a Erik Pimentel le salió lo Puma y le dio un zarpazo a Osvaldo Sánchez y todo estuviera listo para que Rubens Sambueza hiciera el descuento a seis minutos de irse al descanso de la primera mitad.
En los últimos minutos, los de casa tuvieron mayor control de balón y a pesar de que los escarlatas empujaron con todo cayeron en desesperación y el marcador ya no se movió para sufrir su primera derrota.