De nueva cuenta ayer miércoles se observaron por boulevard Hidalgo kilométricas filas de vehículos a raíz de trabajos de re pavimentación de un tramo comprendido entre el acceso a la colonia La Cima y las oficinas de la PGR (Procuraduría General de la República).
Dada la prisa que tenían varios automovilistas, nuevamente volvieron a escucharse los estridentes ruidos causados por el sonar de los claxon tanto de vehículos pequeños, medianos y grandes incluidos los microbuses y camiones.
Mientras privaba la desesperación entre no pocos conductores, la maquinaria utilizada en la ejecución de los trabajos, iban de aquí para allá y de allá para acá (las aplanadoras o pesados vehículos con rodillos de metal con los que se compacta el asfalto).
Otra vez trabajaron en las obras de mejora de la transitada arteria en las llamadas ‘horas pico’ pese al enojo mostrado por automovilistas.
Los hechos demuestran que la opinión de los automovilistas no es tomada en cuenta por las autoridades que se encargan de la programación de los trabajos.