Houston, Texas
Los vestigios del huracán Harvey dejaron ayer a su paso inundaciones devastadoras en Houston, la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos; el creciente nivel de agua afectó a miles de personas que tuvieron que subirse a las azoteas o a zonas altas y sobrepasaron la capacidad de los rescatistas, que no pudieron atender todos los pedidos de ayuda.
Según informó este domingo el Servicio Meteorológico Nacional, el ciclón dejó al menos cinco muertos y decenas de heridos.
Helicópteros, botes y vehículos acuáticos recorrieron los vecindarios de Houston para ayudar a la gente a salir de sus casas o del agua turbia, la cual tenía un nivel tan alto que en algunos lugares alcanzó los segundos niveles.
La inundación fue tan extensa que las autoridades tuvieron problemas en identificar las áreas más afectadas.
Exhortaron a la gente a trasladarse al nivel más alto de sus hogares para evitar quedar atrapadas en sus áticos, y que ondearan hojas o toallas para que atrajeran la atención a su ubicación.
Conforme el nivel del agua incrementó, el Servicio Meteorológico Nacional ofreció otro inquietante pronóstico: antes de que la tormenta pase, algunas partes de Houston y sus suburbios podrían recibir hasta 1,270 milímetros (50 pulgadas) de lluvia. Esa sería la mayor cantidad registrada en Texas.
LLUVIAS RÉCORD
“El alcance e intensidad de estas precipitaciones es algo que nunca antes habíamos visto”, dijo el Servicio Meteorológico Nacional en un comunicado.
El promedio total de precipitaciones terminará en 1,016 milímetros (40 pulgadas) para Houston, señaló Patrick Burke, meteorólogo del servicio.
Brock Long, director de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), dijo que se prevé que el gobierno conduzca una “misión de atención masiva” y predijo que las secuelas de la tormenta requerirán que la FEMA se involucre por años.
“Este desastre será un suceso memorable”, apuntó Long.
Los rescatistas tuvieron que darle prioridad a las situaciones que fueran de vida o muerte, dejando a familias desplazadas a su suerte. El principal centro de convenciones de la ciudad fue rápidamente abierto como refugio.
Gillis Leho llegó al centro empapada. Dijo que se despertó el domingo para encontrar que toda su planta baja estaba inundada. Trató de llevar algunas de sus pertenencias al primer piso y luego agarró a sus nietos. (Agencias AP/Reforma)
Algunas personas utilizaron juguetes inflables para la playa, balsas de goma e incluso colchones inflables para atravesar el agua y llegar a salvo. Otros cruzaron el agua junto con algunas bolsas de basura llenas de sus pertenencias y con transportadoras con animales pequeños.
CLAMAN AUXILIO
El alcalde de Houston, Sylvester Truner, dijo que las autoridades han recibido más de 2,000 llamadas pidiendo ayuda, y se tiene previsto que reciban más. Pidió a los conductores mantenerse lejos de los caminos inundados para evitar que el número de personas varadas aumente.
“No necesito decir que esta es una situación muy seria y que ha sido una tormenta sin precedentes”, indicó Turner en una conferencia de prensa. “Tenemos cientos de reportes sobre inundaciones y prevemos que el número aumente drásticamente”.
Precipitaciones de más de 100 milímetros (cuatro pulgadas) por hora provocaron que los niveles de agua aumentaran a niveles más altos en comparación con la tormenta tropical Allison en junio de 2001, de acuerdo con Jeff Linder, del control de inundaciones del condado de Harris, el cual incluye Houston.
El jefe de Bomberos, Samuel Peña, señaló que en tan solo tres horas equipos de bomberos rescataron a 250 personas, muchas de ellas atrapadas en sus vehículos por la rápida subida del agua en algunas de las principales autopistas.
Tanto Houston como Galveston han registrado precipitaciones de hasta 17 pulgadas de lluvia en las pasadas 24 horas, y el Servicio Nacional de Meteorología anticipó que otras 20 podría caer en los próximos días hasta que la tormenta se mantenga estacionada.
El servicio de transporte público fue sido suspendido y el tráfico a través de la mayor parte de la ciudad es imposible debido a las inundaciones, que han cortado igualmente el tránsito a través de la mayoría de las autopistas.