Son alrededor de 300 hectáreas que componen la Laguna La Escondida, las cuales se han reducido a causa del relleno de sus orillas para lotificar.
Lo anterior constituye un peligro pues los vecinos manifiestan que entre mas se rellene, más se corre el peligro de inundaciones graves como la del 2006, cuando las aguas llegaron a tapar casas y la gente perdió todas sus pertenencias, muebles y vehículos.
Así se crearon varias colonias en torno a este cuerpo de agua que es considerada una reserva ecológica a nivel internacional.
En sus aguas viven patos, garzas, cormoranes entre otras especies, algunas de ellas migratorias como el pato canadiense.
Ante la proximidad de la temporada de lluvias, el riesgo de inundaciones crece.
Hoy nuevamente está en peligro pues una de sus orillas se ha rellenado para crear lotes de 10 por 20 metros, y venden las cartas de posesión en 500 pesos a decir de los vecinos.
Durante un recorrido por esta zona de la ciudad se notó que al menos unas 4 hectáreas de La Escondida fueron rellenadas con escombro, basura, tierra, cobijas, troncos, maleza y piedras.
Al menos se contaron 30 lotes ya delimitados con postas de árboles y alambre de púas.
Igualmente existen descargas de aguas negras que contaminan el vaso lacustre.
Entre las aguas de este cuerpo de agua se observan llantas, cajas de televisores y muebles de baño.
Al fondo de las Laguna se observa la construcción del Parque Cultural Reynosa construido durante el sexenio del Gobernador Eugenio Hernández Flores, donde se presentan actos culturales, gubernamentales, sociales y graduaciones de escuelas.
Las colonias vecinas que han sufrido inundaciones son entre otras: Escondida, Anhelo, Lázaro Cárdenas y La Laguna.