Río Bravo.

El ciclo agrícola 2017-2018, fue un período de producción de grandes dificultades para los agricultores, pues en la zona temporalera, el sorgo sufrió casi pérdida total, mientras que en la zona de riego, las cifras, si bien no son catastróficas, tampoco son alentadoras.

Así fue revelado en reunión de comité hidráulico del Distrito de Riego 026, en donde "fuimos informados por el ingeniero Armando Silva de lo siguiente:

Que los promedios obtenidos en este ciclo agrícola en maíz y sorgo fueron inferiores a los obtenidos en el año anterior hasta en un 20 por ciento.

También se nos informó que el recurso que otorga el Gobierno Federal a los usuarios de riego para obras hidroagrícolas fue restringido considerablemente-

Con los pocos recursos que existen se dará preferencia a obras consideradas como prioritarias con base en análisis realizado por el Gobierno del Estado, el distrito de riego y los propios usuarios", indicó Carlos Hinojosa Hinojosa, presidente del Módulo III-2.

Igualmente se dio a conocer que que el pago a los usuarios del distrito por concepto de aguas no retornadas está depositado en la Tesorería del Estado, para la elaboración de los cheques personalizados, arrojando una cantidad de 111.80 pesos por hectárea correspondiente al ciclo 2016-2017.

Se estima que para el 15 de agosto, los cheques serán entregados a los representantes de las asociaciones civiles.

Retomando el tema de las mermas, Hinojosa Hinojosa dijo que "las causas que originaron estos bajos rendimientos no son imputables a los productores, sino que la madre naturaleza fue implacable, por un lado la prolongada sequía y altas temperaturas afectaron la producción y ya para iniciar la cosecha tuvimos lluvias atípicas en algunas áreas del distrito, de hasta 12 y 13 pulgadas que "acamó" los cultivos de maíz y sorgo.