La Comisión Internacional de Limites y Aguas (CILA) iniciará un diagnóstico y registro de los asentamientos humanos irregulares que invaden derechos de vía del Río Bravo y que durante años han florecido en las riberas del cauce que divide con los Estados Unidos de América.
David Negrete Arroyo, jefe del Módulo del CILA con sede en Reynosa, informó en entrevista que desde hace varios años han hecho la observación a los gobiernos municipales en la región de no permitir la creación de dichos asentamientos humanos irregulares.
El Congreso de la Union aprobó en abril del 2014 reformas a la Ley General de Asentamientos Humanos que en su Artículo VIII establece la prohibición de construcciones o asentamientos humanos en las márgenes o riberas de dios y canales.
Al menos 22 millones de personas viven en zonas de alto riesgo según fuente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía. No se tiene un estimación de cuantas familias se encuentran viviendo en condición irregular, pues la cuenta del Rio Bravo corre a lo largo de la frontera.
Sin embargo, no hay respuesta para prevenir que haya mas de estos a lo largo de la ribera del Rio Bravo, por lo que en este año iniciarán con un programa de inspección y registro y proceder a solicitar la reubicación.
Negrete Arroyo, expuso que esta situación compleja implica un alto riesgo para las familias asentadas en forma irregular, pues recientemente durante el paso de tormentas y meteoros naturales provocaron inundaciones y desbordamientos parciales del Rio Bravo que amenazaron la integridad de miles de personas.
Precisamente por su seguridad es la principal preocupación de promover su reubicación a zonas seguras y en donde no estén expuestos a inundaciones o desbordamientos de agua que pongan en peligro sus vidas.