Una imagen en la que lejos está de reflejar el slogan del actual gobierno local en el que deja en entre dicho que Río Bravo sea grande como su gente, y que por el contrario denigra a los ciudadanos y sus habitantes es el que se presenta en una de las entradas a la ciudad convertía en un basurero, cementerio de chatarra y todo tipo de neumáticos.
A menos de 500 metros del Hospital General y unos cuantos pasos de lo que será el Centro Integral de Justicia se localiza el predio donde se situaba el campamento de Servicios Primarios ahora transformado en un robusto y floreciente basurero, en el que los fétidos olores, las moscas, zancudos y todo tipo de animales alados son la carta principal de bienvenida para propios y visitantes.
“A nosotros como ciudadanos nos da vergüenza que contemos con una entrada tan fea, no se como el alcalde Juan Diego en lugar de andar fanfarroneando y haciendo vídeos chuscos mejor se pone a trabajar y deja de vivir o pernoctar en el vecino país, pues de plano nos da pena ajena la situación en que se encuentra el Municipio”, expresó Jesús García residente de fraccionamiento cercano.
Y es que sumado a la innumerable cantidad de baches por toda la ciudad, el pésimo servicio en la recolección de la basura, falta de obras de infraestructura, en salud y educación, terminan por complementar el verdadero y oscuro rostro de la ciudad entradas como la mencionada lineas anteriores que evidencian una ciudad de pesadilla para el olvido.