Podrá parecer la víctima, pero River Plate también puede arruinarle la Navidad al Barcelona.
El equipo de Marcelo Gallardo ante cualquier otro escenario y rival habría sido favorito a llevarse la corona del Mundial de Clubes, pero mañana ante Barcelona no será así.
Y no es para menos, tener enfrente al los dirigidos por Luis Enrique se resume en recordar que el tridente; Luis Suárez (40), Lionel Messi (44) y Neymar (41) hasta hace unas semanas firmaba 125 goles en 2015, lo que le valió para convertirse en el trío más efectivo de la historia.
Si a ello le sumamos que el atacante uruguayo se estrenó en esta edición del torneo intercontinental con un triplete en Semifinales ante el Guangzhou Evergrande, además de que no se notaron las bajas de Messi y Neymar, ausentes por lesión.
Pero sí hay alguien que conoce de sorpresas, es el equipo español, que en el Mundial de Clubes de 2006 vio como el Internacional de Brasil se llevaba una copa que en el papel debía terminar en manos de Ronaldinho, Deco, Carles Puyol, Andrés Iniesta, quienes manejaban los hilos del equipo de Frank Rijkaard.
Es por ello que River Plate debe emular a aquel Inter que tampoco era favorito ante el Barsa que como en esta edición, replicó una goleada en Semis, en aquella ocasión 4-0 al América.
“Es difícil marcar a este equipo (Barcelona), pero estamos capacitados. Sabemos cómo le tenemos que jugar. Apuesto todo por River, seguramente vamos a ir por todo”. aseguró Matías Kranevitter, quien vivirá su último duelo como jugador de River antes sumarse a su nuevo equipo, el Atlético de Madrid.
Pero no todo tiene tintes heroicos para los argentinos, porque al cuadro Millonario se le sumó otro obstáculo; los culés no sólo recuperaría a Neymar para la Final, sino también al cuatro veces ganador del balón de oro, Lionel Messi.
“Me siento mejor”, fueron las palabras de la “Pulga”, quien habría superado un cólico nefrítico que lo alejó de las Semis ante el equipo chino.