Tremendo boquete se abrió repentinamente al paso de un camión materialista que transitaba por el bulevar Bugambilias y viaducto Reynosa, provocando tremendo susto en quien manejaba la unidad.
Ya anteriormente en ese mismo lugar se había aperturado el concreto pero nadie lo reparó, pasaron los días y con el peso de las unidades motrices que circulan por la arteria, el hoyanco se volvió más grande al grado de que ya le fue colocada una cinta amarilla con la que se advierte a los automovilistas sobre el peligro existente.
Bajo el tramo dañado corre un sistema de drenaje abierto, según se pudo observar.
Además de la cinta, también pusieron junto al agujero una tarima de madera para evitar un posible accidente vehicular.
La existencia de una malla de fierro en el área dañada, evitó males mayores al vehículo que cayó en el hueco que se abrió sobre el concreto hidráulico.
Hace casi tres meses, se presentó el primer ‘caído’ y los vecinos al ver que nadie acudía a efectuar la reparación correspondiente, se dieron a la tarea de rellenar el orificio con caliche, material que aún sigue ahí.
El riesgo de que se registren otros más podría obligar a cerrar la rúa por la que circulan miles de automotores diariamente.
Algunos conductores y residentes de Hacienda Bugambilias pidieron la intervención de alguna autoridad para que proceda a dar solución al problema en el menor tiempo posible antes de que se suscite un accidente vial.