La Roma gestó una de las hazañas más grandes en la historia de la Champions League al levantarse de la lona luego del 4-1 en la ida contra el Barcelona, pero ahora ganar 3-0 en el Estadio Olímpico y convertirse en Semifinalista.
La Loba dejó sembrado a Lionel Messi y a uno de los grandes favoritos para conquistar la Orejona.
El milagro se gestó desde que al 6' Edin Dzeko acercó al cuadro romano, al 58' provocó el penal que acertó Daniele de Rossi, mientras que al 82' Manolas se convirtió en el héroe de esta historia, el hombre que con un cabezazo provocó la locura en la capital de Italia.
Leo y el Barsa estuvieron irreconocibles, fallando pases de rutina. Despertaron hasta que tenían tres goles en la canasta, por eso al 91', Ousmane Dembélé estuvo cerca del gol de la clasificación cuando el portero dejó el marco vacío al cortar con una barrida una ofensiva de Gerard Piqué, pero el francés mandó la pelota apenas arriba del travesaño.
Andrés Iniesta, incrédulo en la banca, observó la debacle de su equipo. El cerebro blaugrana había sido sustituido por André Gomes, un cambio muy extraño y que le acarreará aún más críticas a Ernesto Valverde.
Cuando sonó el silbatazo incluso los niños aficionados de La Roma soltaron en llanto, al igual que Allison y Stephan El Shaarawy. Un resultado épico, del que se hablará mucho y que le dará la vuelta al mundo. Lo más sorprendente, un resultado más que justo.
En el Estadio Olímpico de Roma también se esfumó la posibilidad de otro Triplete ya que el Barsa se roba España al ser líder de LaLiga y finalista de Copa contra el Sevilla.
La Roma agobió al Barsa. Cuántas veces se ha visto que el Barcelona apenas generé 6 disparos contra 15 del rival, que los catalanes apenas terminen un partido con el 55 por ciento de posesión, pero estéril, sin poner en aprietos a sus contrincantes.