La tercera no fue la vencida para Marco Estrada.
Por tercera ocasión en su carrera, el mexicano llevó un juego sin hit ni carrera hasta el octavo inning, y no sólo se lo quitaron, sino que su compatriota Roberto Osuna estuvo a punto de echarle a perder la victoria.
Apoyado con cuatro jonrones, Estrada (4-2) permitió dos carreras en ocho entradas y se apuntó ayer su cuarto triunfo de la temporada, para ayudar a que los Azulejos superaran ayer 5-4 a los Medias Rojas.
Con un out en el octavo rollo, Chris Young le pegó cuadrangular para quitarle la joya. En junio del año pasado, llevó un sin hit y un perfecto en aperturas consecutivas contra Orioles y Rays, respectivamente, pero también los perdió en la misma entrada.
El sonorense retiró a 19 hombres en fila, antes del vuelacercas de Young.
Con el duelo 5-1 en favor de los emplumados, Estrada, quien sólo aceptó dos hits y regaló tres bases, además de ponchar a cinco, salió para el noveno, pero recibió un doble de Dustin Pedroia, que marcó su partida.
A pesar de que no era situación de rescate, Osuna entró y recibió cuatro imparables, tres de ellos productores, pero abanicó a dos, incluyendo a Marco Hernández para sentenciar la victoria.
En Detroit, Miguel González recetó un chocolate y otorgó un indiscutible en 1.1 actos desde el bullpen, en la derrota de los Medias Blancas 5-2 ante los Tigres.
En Chicago, Jake Arrieta toleró tres rayitas en cinco capítulos y sufrió su primer revés desde el 25 de julio de 2015, en duelo que los Cachorros perdieron 3-2 contra los Diamantes.