Tras sobrevivir a la bestial agresión de que fuera objeto una valerosa mujer tuvo la osadía de investigar y dar con el paradero del autor del atentado y condujo a elementos del Ejército hasta el sitio donde se ocultaba y lo detuvieron.

Pero, el sujeto disfrutó de los beneficios garantistas del nuevo sistema de justicia acusatorio y en poco tiempo obtuvo su libertad, dado a que su arresto se registró más de 9 horas después de consumados los hechos.

Visiblemente desilusionada la mujer permanecía en las instalaciones de la PGJE, en espera de que le practicaran estudios médicos y sicológicos.

Se encontraba decepcionada, pero en su mente albergaba la esperanza de que tarde o temprano las autoridades tomaran en cuenta el esfuerzo que realizó para dar con el paradero del sujeto.

El individuo según se supo es encargado de un bar que se ubica frente a la PGR, fue liberado debido a que no hubo flagrancia y su detención no fue calificada de legal.

Pero la mujer aportó una serie de pruebas, señalamientos y evidencias del atentado que sufrió, además de la incriminación directa.

LOS HECHOS.

La infortunada mujer dijo que había salido a pasear con el individuo en un vehículo de su propiedad, luego de conocerse en un salón de baile.

Solo que el sujeto de pronto se tornó violento, la quiso atacar y ella se defendió ferozmente, solo que la superioridad física del agresor la venció y la arrojó hacia el exterior de la unidad, quedando su cuerpo atrapado con la portezuela, lo que aprovechó el individuo para arrastrarla con claras intenciones homicidas.

Asegura que sobrevivió de milagro. Dijo que espera que las autoridades encargadas de procurar justicia hagan su trabajo.