Pese a que caballos, burros o vacas han causando accidentes y provocado muertes o lesiones fuertes a ciudadanos, los dueños siguen sin hacer caso y dejan en cualquier punto de la ciudad a los animales.
En el área del libramiento Luis Echeverría, es común ver a burros o caballos deambulando por la vialidad, o en su caso amarrados comiendo pasto.
“Aquí en la colonia siempre hay animales caminando solos, o los dejan ahí en el árbol, pero es un riesgo para todos, deberían de aplicar la ley”, expresó Alejandra López, vecina de la zona centro.
Lo anterior genera riesgos para los automovilistas, ya que los animales pueden sentirse amenazados al circular alguna unidad motriz, pero los dueños los siguen dejando en cualquier parte.
De acuerdo al Reglamento para la Protección y Control de Animales Domésticos y de Granja del Municipio, todo poseedor de un animal, es responsable de los daños, perjuicios y molestias que ocasione a las personas, bienes y al medio en general en la vía púbica.
En el artículo 14, se informa que la tenencia de cualquier animal, prohíbe a su poseedor a liberarlos en la vía pública, tenerlos continuamente atados, salvo que el medio utilizado tenga una extensión mínima de tres metros que permita su movilidad, y deberá existir en todo caso, un cartel que advierta visiblemente de su presencia.