Ciudad de México

Enrique Guzmán se confiesa, siempre le ofrecían participar en películas que no eran mucho de su agrado, en donde sólo tenía que cantar.

Conocido como uno de los cantantes de rock and roll más importantes de México, gracias a canciones como “La Plaga”, en la década de los sesenta el rockero estaba en la cima del éxito profesional.

La música lo llevó a pisar otros terrenos del arte como la cinematografía, pero mientras los productores querían ver actuar al galán de moda, para él las películas siempre fueron un pretexto para cantar.

“A mí me ofrecían siempre películas muy mam...: ‘Ahí sales y cantas una canción’. Eran el motivo, hacían una película para que saliera yo cantando.

“Pero no me gustaban las pinc... historias, así que decidí producir algunas cosas. El primer productor de cine que hubo en Ecuador fui yo con Romance en Ecuador, en 1965, luego hice películas hasta de miedo en Hollywood, pero mi negocio siempre fue cantar”.

Lo único que ha podido detener su labor arriba del escenario han sido sus problemas de salud. Guzmán ha tenido que luchar con problemas cardiacos, cálculos renales y, el año pasado, le extirparon parte del colon, operación que lo hizo pensar en el peor desenlace.

“Cuando me hicieron esta operación tan violenta, y vi a todos mis hijos juntos acompañándome, eso quería decir que yo estaba muy grave”.

Como un festejo a la vida, Enrique Guzmán desea dejar huella con el concierto que ofrecerá el 31 de octubre en el Auditorio Nacional.