Taquicardia, nauseas, pánico, temblores, aturdimiento, palpitaciones y en el peor de los casos, la muerte, es lo que causa a las mascotas, el sonido de los fuegos artificiales que algunas personas utilizan durante los festejos de Año Nuevo.
Tan sólo durante los festejos de Año Nuevo del 2016, un total de 32 perros desaparecieron y al menos diez murieron atropellados , luego de que al asustarse con los cuetes que se explotaron en estas fiestas, salieron huyendo de sus hogares.
Mercedes Martínez, de la Comunidad de Rescatistas Animalistas Independientes (CRAI) informó que esta problemática se sigue presentando año con año.
“Es el problema más grave y se puede ver en redes sociales, muchas personas anuncian que sus perritos salieron de casa asustados por las explosiones y algunos los encontraron muertos”.
Además explicó, este problema no se presenta sólo en perros o gatos, pues durante los festejos del año pasado, se detectó una gran cantidad de pájaros y pichones muertos en las calles.
“Lo principal, es que seamos personas responsables, que tomen conciencia de que no nadamás les hacen daño a los animales sino también a las personas de la tercera edad”.
ABRACELOS
Una de las recomendaciones dijo, es que se abrace a los animalitos a fin de que se sientan protegidos.
“Hay que arroparlos, abrazarlos para que se sientan protegidos. En caso de que se queden solos en casa, resguardarlos, si tienen “pet taxi” que los resguarden y los tapen”.
Destacó que la afectación es diferente en cada raza de perros, pero todos, sufren al escuchar estas explosiones.
“Depende del sentido auditivo del animalito, hay algunos que no escuchan porque ya están grandes de edad. Todas las razas son susceptibles, incluso hemos visto a perritos callejeros que se esconden, no salen porque le tienen miedo a los cuetes”.
Otra de las recomendaciones dijo, es que se les ponga música a los animalitos para que no se asusten.
“Si están dentro de casa, les pongan música para que no se asusten y escuchen más la música que las explosiones”.
TRAUMAS
Mercedes Martínez explicó que los perritos que han vivido situaciones de riesgo, relacionan los cohetes con estas etapas en su vida y por ello, sufren algunos traumas.
“Ellos retroceden y recuerdan si pasaron alguna situación de riesgo Ahorita hay más cuetes que en otros años, un cachorrito no se acuerda de muchas cosas, pero uno adulto sí relaciona los cuetes con alguna situación negativa que haya vivido”.
Destacó que en muchas partes la explosión de cuetes la realizan a temprana hora y que incluso hay algunos juegos pirotécnicos llamados “palomas” cuyo sonido es tan fuerte, que pueden matar del susto a un animalito.
“Mi perrita por ejemplo que vivió una situación de violencia no quiere salir de noche, oscurece y se queda en su casita, jala la comida y el agua y ya no sale. Donde yo vivo le tocaron situaciones de riesgo entonces al escuchar los cuetes es recordar lo que pasó”.
Mencionó que incluso, existen algunos animalitos que han estado a punto de morir.
“Una compañera me contó que su perrito estaba sufriendo ataques y taquicardia de tanto cuete el año pasado, lo tenía abrazado, como es enfermera sabe cómo actuar. Me dijo que casi se le moría”.