En un duelo de fajadores, Santos pegó más que el Pachuca y se impuso 3-2.
Los Guerreros y los Tuzos intercambiaron golpes rápidos, en pocos minutos, cuando el rival aún no se reponía mentalmente de un gol y ya había recibido otro, y en ese escenario los locales salieron mejor librados.
El Pachuca tardó en conectarse en el partido. Regaló el lapso inicial y el primer obsequio vino al 21’ por parte de Óscar Pérez, cuando al cortar un centro dejó el balón a merced de Martín Bravo, el hombre que hace unas semanas era suplente y que ahora no se cansa de anotar, viviendo su segundo aire.
El Pachuca todavía no se recuperaba del golpe cuando Stefan Medina metió la mano en el área y el árbitro señaló el penal que, al 24’, acertó Néstor Calderón.
Por si no fuera suficiente, al 35’ Luis Ángel Mendoza marcó un gran gol tras un zurdazo de media distancia; el balón entró pegado al poste izquierdo.
Al 71’ Jonathan Urretaviscaya hizo gala de técnica al prender el balón con la zurda, con la suficiente fuerza y rapidez para vencer a Agustín Marchesín, al 71’.
Y tres minutos después, con la misma fórmula que habían empleado los de casa, Érick Gutiérrez anotó mediante un cabezazo, incrustando el esférico en el ángulo superior izquierdo.