Washington, D.C.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con usar la fuerza militar para cerrar la frontera sur de su país, si México no puede detener a la caravana de migrantes procedentes de Centroamérica que se dirige al norte.
Por medio de su cuenta personal de Twitter, esta mañana Trump reiteró sus advertencias a los gobiernos de El Salvador, Guatemala y Honduras, de suspenderles la asistencia económica que les da Washington si no detienen a la caravana de migrantes.
“Observo al partido demócrata liderando (porque ellos quieren fronteras abiertas y las débiles leyes existentes) el asalto a nuestro país por Guatemala, Honduras y El Salvador, cuyos líderes están haciendo muy poco para detener a este flujo grande de personas, incluidos muchos criminales que están entrando por México a los Estados Unidos…”, escribió Trump en su primer mensaje de Twitter la mañana de este jueves.
“En adición a detener todos los pagos a estos países, que parece no tienen control sobre su población, debo, en los términos más enérgicos pedirle a México detener este ataque y si no pueden hacerlo, llamaré al ejército y cerraré nuestra frontera sur…”, atizó el presidente estadunidense en un segundo mensaje.
En el tercero acotó:
“El asalto a nuestro país a nuestra frontera sur, incluyendo al elemento del flujo de drogas, para mi es más importante como presidente, que el comercio o el Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá. Espero que México pare este ataque a su frontera norte. Las leyes débiles son culpa de los demócratas”.
Desde el inicio de esta semana, el mandatario ha usado el tema de la caravana de migrantes centroamericanos como un lema de campaña electoral a favor del partido republicano.
A unos días de las elecciones federales de medio periodo del próximo martes 6 de noviembre, en las que se definirá la nueva composición política del Capitolio, Trump apela a la sociedad estadunidense conservadora y anti-migratoria, para responsabilizar a los demócratas de la presunta crisis de inmigración y supuesta amenaza por la caravana a la seguridad nacional.
Al mismo tiempo, Trump no ceja de presionar pese a las negativas, del gobierno del saliente presidente Enrique Peña Nieto y del entrante, Andrés Manuel López Obrador, de convertir a México en un filtro migratorio de Estados Unidos.
Como parte de esa presión y para exigir la detención de la caravana centroamericana dentro del territorio mexicano y lejos de la frontera sur de Estados Unidos, Trump envió a México a Mike Pompeo, su secretario de Estado, quien llegara este jueves por la noche para reunirse el viernes 19 con Marcelo Ebrard, futuro secretario de Relaciones Exteriores; el presidente Enrique Peña Nieto y con Luis Videgaray, el todavía canciller.