Ciudad de México

El conservador Don Servando Villegas (Héctor Bonilla) se ve obligado a dejar el asilo donde vive para mudarse con Francisco, mejor conocido como “Frank”, el menor de sus hijos, donde se enfrenta a diversas situaciones que lo sacan de su zona de confort.

Bajo esa premisa, la película Un Padre No Tan Padre, ópera prima del director Raúl Martínez, aborda temas de actualidad, como la diversidad sexual y la legalización de la mariguana medicinal, con la intención de entretener, mientras Don Servando se vuelve más tolerante.

“Los toques de comedia y los toques de melodrama son una afortunadísima combinación, y el personaje es maravilloso.

“En este caso tenemos perfectamente narrado cómo este hombre tiene un carácter infumable, es un hombre irascible, chapado a la antigua, insoportable, y de pronto es sujeto de cambio por las circunstancias”, resaltó Bonilla.

Benny Ibarra interpreta a “Frank”, quien reside con su hijo René (Sergio Mayer Mori) en la casa de su pareja Alma (Jacqueline Bracamontes), ubicada en San Miguel de Allende, Guanajuato.

Pero no están solos, pues en la vivienda también habitan distintas parejas que llevan un estilo de vida bohemio y moderno.

“Mi personaje es mediador, se la pasa intentando llevar la fiesta en paz hasta que llega su padre y poco a poco los genes comienzan a hacer de las suyas y empieza a convertirse en él por varias razones”, explicó Ibarra, quien también se encargó de musicalizar la película”, añadió Ibarra.

A cargo de Cinépolis Distribución, la película ya se estrenó en todo el país.