Altamira, Tam.
Frente a la casa de la familia de la pequeña Aleyda Estrella, de tan sólo 8 años de edad, que fuera abusada sexualmente y asesinada sin piedad, velan y dan el último adiós para posteriormente darle cristiana sepultura.
Desde la mañana de este miércoles, familiares y vecinos instalaron unas carpas blancas en la vialidad, frente al domicilio ubicado en la calle Ficus entre C2 y Fresno del Fraccionamiento Arboledas.
Familiares pidieron a los medios de comunicación no acercarse al velatorio que le organizaron en la vivienda en donde ocurriera este horrendo crimen presuntamente a manos de un sujeto que apareciera muerto -golpeado y colgado- el martes al mediodía en un paraje solitario del ejido la Pedrera.
Vecinos de la familia argumentaron de forma extraoficial, que el sujeto al que le conocían como Juan “El Gordo” Bautista, frecuentaba a la familia, por lo que presumen que él haya sido el autor del horrendo asesinato en donde la niña recibió puñaladas, una en el cuello.
Vecinos se organizaron para ayudar a la humilde familia, incluso un carpintero de las cercanías se ofreció a fabricar un ataúd de madera en donde se le daría cristiana sepultura a la niña.
De acuerdo a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), se han tomado muestreos de Juan José Bautista a fin de determinar si existe afinidad con los restos encontrados en el cuerpo de la menor y así determinar si realmente es el responsable de este atroz crimen que conmocionó a la zona sur de la entidad.
El martes, la PGJE advirtió que “El Gordo” fue hallado golpeado y colgado en un árbol, y señaló que “es preciso señalar que por mandato constitucional la investigación y persecución de los delitos, así como el ejercicio de la justicia, son facultad exclusiva de la autoridad y en particular de la Procuraduría General de Justicia del Estado y en este caso como en otros se utilizarán todos los recursos humanos y científicos para esclarecer los hechos”.