Carson Wentz sigue justificando por qué las Águilas lo tomaron en la segunda posición global del pasado Draft.
El pasador novato comandó ayer la segunda victoria de Filadelfia tras derrotar 29-14 a Chicago, en un duelo en el que la defensa recuperó dos balones sueltos, interceptó en una ocasión a Jay Cutler y lo capturó tres veces.
Además, los emplumados contaron con la buena puntería del pateador Caleb Sturgis, quien hizo efectivos tres intentos de gol de campo, el más largo de 53 yardas cuando restaban ocho segundos para el descanso.
Wentz, quien presume un temple como si llevara algunos años en la Liga, terminó la noche con 190 yardas, tras completar 21 pases de 34 intentos, un pase de anotación y sigue manteniéndose sin intercepciones.
El QB de Filadelfia se convirtió en el primer debutante en ganar los dos primeros duelos de su equipo en una campaña sin cometer pérdidas de balón, desde que se fusionaron la NFL y la AFL (1970).
Los Osos fueron perdiendo piezas importantes toda la noche, ya que LB Lamar Houston abandonó en el segundo periodo por una dolencia en la rodilla izquierda; el tacle Eddie Goldman también dejó el cotejo con un problema en el tobillo y los backs defensivos Adrian Amos y Bryce Callahan salieron por conmoción en el tercer cuarto.
Por si fuera poco, Cutler fue reemplazado por Brian Hoyer cuando restaban menos de un minuto en el tercer período debido a una molestia en la mano.
El corredor Ryan Mathews acabó con dos TD y 32 yardas terrestres. Esta fue la primera ocasión que tiene un juego de múltiples anotaciones desde la Semana 15 de la campaña 2011, cuando estaba con San Diego.
Previo al inicio del encuentro, tres miembros de las Águilas -Steven Means, Malcolm Jenkins y Ron Brooks, levantaron sus puños derechos durante el himno nacional para unirse a las protestas contra el racismo.