Arrasan Trump y Clinton en Florida
Los resultados fueron un golpe mortal para el senador Marco Rubio
Florida, E.U.
El republicano Donald Trump y la demócrata Hillary Clinton lograron sus primeras victorias del considerado tercer Súper
Martes.
Ambos se hicieron con uno de los premios grandes de la noche: Florida, por un amplio margen, según proyecciones de AP y The New York Times.
Clinton, además, habría vencido a su rival en la contienda por la nominación presidencial demócrata, el senador Bernie Sanders, en Carolina del Norte y en Ohio.
Otro ganador de la noche fue John Kasich, quien logró vencer al magnate Trump en Ohio, donde es Gobernador.
Trump se encontraba esta noche en su resort de Mar-Lago en Palm Beach, en el sur de Florida, y en las cercanías, a unos 10 minutos de allí, se ubicaba su probable rival demócrata en una elección general Hillary Clinton, en el Centro de Convenciones de Palm Beach.
Los resultados en Florida -estado en el que el ganador se lleva todos los delegados- fue un golpe mortal para uno de los contendientes republicanos, el senador Marco Rubio.
Tras ser derrotado en casa, Rubio ofreció un discurso en el que anunció la suspensión de su candidatura.
“A pesar de que estamos en el camino correcto, no vamos a llegar a la Casa Blanca”, reconoció.
Ahora, Trump busca imponerse también en Missouri, Carolina del Norte e Illinois, los otros estados en disputa.
Cualquier derrota del magnate en alguno de ellos daría nuevas esperanzas a los republicanos que buscan bloquear al magnate inmobiliario y evitar que consiga los mil 237 delegados necesarios para obtener la nominación del partido en la convención de julio.
Entre los demócratas, la ex Secretaria de Estado Clinton, de 68 años, espera ampliar su ventaja sobre Sanders y hacerse también con Missouri e Illinois.
DEJA RUBIO CONTIENDA
El senador por Florida Marco Rubio anunció hoy su retiro de la contienda por la nominación republicana a la Casa Blanca.
Esto, luego de su derrota en las primarias de Florida ante el magnate Donald Trump, quien se perfila como el abanderado republicano.
El senador por Florida fracasó en su intento de aglutinar a los republicanos de su propio estado para que enfrentaran juntos al multimillonario.
Acompañado por su mujer y sus cuatro hijos, Rubio dijo en Miami que renuncia a su sueño de ser presidente en 2016 y quizás para siempre.
“A pesar de que estamos en el camino correcto, no vamos a llegar a la Casa Blanca”, reconoció.
“Vivimos en una república y nuestros votantes toman sus decisiones, dijo Rubio cuando sus seguidores hicieron mofa de la victoria de Trump.
El discurso de Rubio fue una réplica tenue de las tácticas de campaña de Trump, cuando advirtió que para él habría sido más sencillo explotar la ira y ansiedad durante la campaña.
Sobre el estilo del millonario, Rubio advirtió que las políticas divisionistas dejarán a Estados Unidos como una nación fracturada.
“Estados Unidos está en la mitad de una tormenta política real, un tsunami verdadero y deberíamos todos nosotros verlo venir”, alertó Rubio.
Rubio le expresó al público que sabe que los votantes están molestos y existe hambre de nuevos rostros y voces en el Gobierno.
La decisión de Rubio es resultado de sólo tres victorias en las primarias electorales, pero las de Florida, en donde el ganador obtenía todos los delegados en disputa, fue la más devastadora.
Hace apenas seis años, era uno de los favoritos del movimiento ultraconservador Tea Party que aplastó al candidato de la corriente dominante republicana para obtener un escaño en el Senado federal.
Pero el panorama político le dio la espalda al senador de Florida, quien fue criticado como un candidato presidencial demasiado convencional en un año en el que los votantes exigen a un personaje externo a la política establecida.
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