‘No sacrificar a la juventud’

En uno de sus traslados, el Papa Francisco fue llevado en un pequeño vehículo. (Foto: Reforma).

Los jóvenes mexicanos no pueden ser sacrificados al mandarlos a morir ante la falta de oportunidades, advirtió el Papa Francisco.

“Ser joven en México es la mayor riqueza y por lo tanto, no puede ser sacrificada”, denunció en su encuentro con la juventud en el estadio “José María Morelos y Pavón” de Morelia.

“Jesús nunca nos invitaría a ser sicarios, sino que nos llama discípulos. Él nunca nos mandaría a muerte, sino que todo en Él es invitación a la vida”.

La riqueza de la juventud, reconoció el Papa, es difícil de reconocer cuando no hay oportunidades de estudio y trabajo.

“Es difícil sentirse la riqueza de una nación cuando no se tienen oportunidades de trabajo digno, posibilidades de estudio y capacitación.

“Es difícil sentirse la riqueza de un lugar cuando, por ser jóvenes, se los utiliza para fines mezquinos seduciéndolos con promesas que al final no son tales”, advirtió.

En este sentido, el Papa pidió a los jóvenes de no dejarse excluir y desvalorizar, para que no les traten como mercancía, y les explicó que a menudo, con la promesa de obtener privilegios, se les engaña.

“La principal amenaza es creer que por tener un gran ‘carro’ sos feliz.

“La principal amenaza a la esperanza es hacerte creer que empiezas a ser valioso cuando te disfrazas de ropas, marcas, del último grito de la moda, o cuando te volves prestigio, importante por tener dinero.

“La principal amenaza es cuando uno siente que tiene que tener plata para comprar todo, incluso el cariño”, dijo.

De esta manera, el Papa relacionó estas actitudes con una mayor inclinación a caer en la telaraña del narcotráfico, tema que volvió a abordar como lo hizo cuando llegó a México el pasado viernes.

“Entiendo que muchas veces se vuelve difícil sentirse la riqueza cuando nos vemos expuestos continuamente a la pérdida de amigos o de familiares en manos del narcotráfico, de las drogas, de organizaciones criminales que siembran el terror”, observó.

Sin embargo, el Pontífice recordó que no siempre el dinero hace feliz.

“No tendrán los bolsillos llenos de plata, pero tendrán algo que nadie nunca podrá sacarles que es la experiencia de sentirse amados”, afirmó.

Y recordó que, como le dijo al Presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, él considera que los jóvenes son la mayor riqueza del país.

“Constato nuevamente otra certeza, algo que le dije al Presidente de la Nación en mi primer saludo. Uno de los mayores tesoros de esta tierra mexicana tiene rostro joven, son sus jóvenes”, afirmó.