Encadenan a demente

Raymundo permanecía encadenado y sucio en el patio de su casa, ya que de acuerdo con su mamá, era la única forma en que podría controlarlo.

Entre su realidad y locura, Raymundo pedía que lo desencadenaran, ya que la cadena le lastimaba mucho el tobillo, mostrando golpes y moretones que le han hecho y se ha provocado por cargar con esa tabla a diario.

“Quítalas… duele”, expresaba Raymundo mostrando su pie, al tiempo que se sobaba. Levantando temblorosamente las manos en las que mostraba algunos rasguños.

Sentado en la entrada de su cuarto, Raymundo hacía señas de dónde dormía, en unos viejos cojines de un sofá rodeado de tierra, sillas y una cubeta, y sin el menor aseo, sucio y con mal olor. 

Tras cinco minutos de estarle hablando a su madre, Ana Luisa Arriaga, para preguntarle porqué tenía amarrado a su hijo, salió tranquila del último cuarto de la casa.

“Es que mi hijo es muy maldoso, y luego los niños que pasan por aquí lo hacen enojar, le avientan piedras… la gente me lo golpea”, expresó la señora.

AL CENTRO DE SALUD MENTAL

Trasladan a Raymundo Arriaga al Centro Integral de Salud Mental tras el reporte que hizo El Mañana al Sistema DIF ante el trato inhumano en que se le tiene para poder controlarlo.

El equipo de Trabajo Social del DIF acudió a la colonia Voluntad y Trabajo 4, a la cuadra 10 de la calle Río Elva para rescatarlo y darle la atención médica necesaria.

Los familiares de Raymundo serán investigados, y por lo pronto él se quedará internado en el Centro Integral de Salud Mental. (Nuevo Laredo, Tam.)