Golpea madre a su hijo, abuela quiere salvarlo

Por más de tres años no se presentó a ver al niño en su casa.

“Sólo le pido a Dios que me dé fuerzas para seguir con vida y poder cuidar a mi nieto para que ya no sea golpeado”, fueron las palabras de Doña Victoria Olarte Calderón, quien pide la patria potestad del menor.

Cansada de ver cómo su nieto, Juan Antonio, es maltratado por su madre y padrastro, acudió tres veces a la Procuraduría de la Defensa del Menor, la Mujer y la Familia del DIF municipal, pero no le brindan la ayuda porque el niño no tiene el apellido del padre biológico.

La abuela, con domicilio en calle Martín Eloy Gutiérrez número 214 en la colonia Ampliación Nuevo Milenio, señaló que las autoridades de la Procuraduría, le dijeron que tenía que llevar una prueba de ADN y de paternidad, para poder iniciar los trámites para solicitar la patria potestad del menor.

La madre del menor, Amelia Ortega Cuadros, por ganarse unos 10 mil pesos, le puso el apellido de otra persona que estaba a punto de recibir una herencia, pero entre las condiciones que tenían para cobrarla era tener familia. 

“Mi exnuera me trajo al niño cuando tenía apenas 10 meses de nacido, lo abandonó por más de tres años y ahora me lo vino a quitar porque está viviendo con un hombre, pero los dos lo maltratan”, dijo.

Victoria Olarte comentó que cuando le llevó a su nieto, estaba lleno de ronchas porque no lo bañaba y lo descuidaba, llevándolo de inmediato al médico para su atención.

Al transcurrir unas semanas y ver que la madre no llegaba por él, acudió a las autoridades del DIF municipal en el 2012 a solicitar la ayuda para que la madre se hiciera cargo del menor o se lo otorgaran para cuidarlo, pero no hicieron nada para tratar de apoyarla.

Por más de tres años no se presentó a ver al niño en su casa y cuando el menor la veía en la calle corría a saludarla, pero ella le decía ¿Te conozco?, apartándolo de su camino.

La madre del niño, tras irse a vivir con un hombre fue a quitárselo, en los últimos meses el menor ha sido maltratado físicamente y psicológicamente por su madre y padrastro.

JUEGO PELIGROSO

“Mi exnuera me comentó que el año pasado los hijos de su pareja, lo ataron de manos, pies y le taparon la boca con cinta para ser metido en un tambo de agua fría y desde entonces se enferma mucho”, añadió.

Hay días que no puede ver a su nieto por órdenes del marido de Amelia, quien le prohíbe que se acerque al niño. 

Cuando la madre del menor se lo lleva, le quita el poco dinero que le da a su nieto, dejándolo sin comer, situación que le es comentada por el pequeño Juan Antonio.

Vendiendo ropa en un tianguis y con el dinero que le dan dos de sus hijas es como logra sobrevivir doña Victoria.

El problema que presenta el infante, le fue expuesto a las autoridades de la Procuraduría del DIF, quienes al estar enteradas de esto, sólo dijeron que no pueden hacer nada porque su abuela, no es legalmente familiar del niño, hasta que haya una prueba de paternidad.

En su desesperación les pidió que el niño fuera enviado a una casa hogar, si no le permitían tenerlo porque tiene miedo que un día le den un golpe que pueda causarle la muerte.