¿Estás comiendo cáncer?

Muchos alimentos dañan las células humanas y alteran el material genético que existe dentro de éstas.

¿Sabías que los productos cárnicos, los refrescos y la barbacoa contiene carcinógenos? De acuerdo a un artículo publicado en el sitio “My Life”, se demostró que muchos alimentos dañan las células humanas y alteran el material genético que existe dentro de éstas.

Los expertos recomiendan evitar los alimentos como carnes procesadas, los cuales aumentan el riesgo de cáncer. “Este proceso conduce a una multiplicación celular mayor a lo normal y, como resultado, puede aparecer un tumor”, de acuerdo con los expertos nutricionistas. A continuación te contamos cuáles algunos de estos alimentos que aumentan el riesgo de cáncer:

LAS CARNES PROCESADAS: 

La salchicha, el chorizo, el tocino y hasta la pechuga de pavo contienen cantidades considerables de nitritos y nitratos. Cuando estas sustancias entran en contacto con el estómago, se liberan nitrosaminas, sustancias consideradas mutagénicas, capaces de promover la mutación del material genético.

LOS ALIMENTOS RICOS EN SAL:

“Si se ingieren en cantidades superiores a cinco gramos por día, la sal puede dañar las células que se encuentran en la pared del estómago”, explica el nutricionista Vinicius Trevisani, del Instituto del Cáncer de São Paulo. Esta agresión genera cambios celulares que pueden conducir a la aparición de tumores.

ASADO: El humo del carbón tiene dos componentes cancerígenos: alquitrán e hidrocarburos aromáticos policíclicos. “Ambos están presentes en el humo y permean la comida que se prepara en la parrilla”, explicó Vinicius. “Estos también tienen factores mutagénicos que conducen a la aparición de tumores”.

LOS ALIMENTOS

CON PESTICIDAS: No hay manera eficiente de limpiar las frutas y verduras que tienen pesticidas. “A menudo, estos elementos se aplican a las semillas y se convierten en parte de la composición de los alimentos”, dice Vinicius. Él explica que el pesticida provoca diversos problemas de salud cuando se tiene contacto directo con estos alimentos, sin embargo, aún está por confirmar la relación entre los pesticidas y la aparición de células cancerígenas.

DIETA BAJA EN FIBRA: 

El nutricionista Vinicius Trevisani manifiesta que el intestino se beneficia en gran medida por la ingesta adecuada de fibra. Garantizan un buen tránsito intestinal, con el propósito de eliminar los ácidos biliares secundarios, un producto de la digestión presente en el intestino. Esto evita que las células intestinales puedan defender y atacar agentes extraños, además de la proliferación celular incontrolada.

La dieta humana ha cambiado y cada vez cambia más; tristemente no cambia para bien. Hace un siglo el 90% de los productos de la canasta familiar eran alimentos no procesados; los cuales contienen químicos por doquier. No se puede negar que los alimentos procesados son deliciosos, pero si los haces parte de tu dieta cotidiana, puedes tener por seguro que se va a notar de una u otra manera en tu cuerpo; y este comenzará a manifestarse a través de enfermedades y malestares corporales.

HÁBITOS DE OFICINA TE ESTÁN ENFERMANDO

 SALTARTE EL DESAYUNO: Mientras que la ciencia se debate un tanto, la mayoría de los expertos coinciden en que es mejor comer el desayuno que no comer nada.

Puede ser fácil pasar la mañana entera con solo una taza de café, pero la investigación sugiere que comer el desayuno puede ayudar a disparar tu metabolismo y ayudar a aumentar tu energía para que no te sientas con pereza el resto de la mañana. Si eso no es lo suficientemente convincente, algunos expertos incluso abogan por comer una dona o un pan dulce (en vez de no comer nada), aunque, obviamente, esa no debe ser una opción recurrente.

APOYAR TU ROSTRO SOBRE TU MANO: Claro, es cómodo (o quizás no te das cuenta de ello) pero tocarse la cara en exceso puede ser un enemigo para el buen cuidado de la piel o la higiene. Tocarte la cara puede hacer que seas más propenso al acné u otras molestias, ya que se propagan las bacterias y otros agentes que afectan la piel.

ALMORZAR EN EL ESCRITORIO: Tu cerebro necesita un descanso. Si no descansas, tu productividad y niveles de energía caen en picado. Además, hacer varias cosas a la vez te vuelve una persona ineficiente, por lo que probablemente no rindas mucho a final de cuentas.

UNA POSTURA FLOJA EN LA SILLA: Mal postura=Mala salud; es algo que podría ser muy cierto. Los estudios demuestran que cuando te explayas en la silla tu genio o temperamento puede cambiar. Las malas posturas están asociadas al uso de dispositivos tecnológicos, ya que la parte superior de tu cuerpo mantiene tensionada, también, podría conducir a dolor de cuello y hombro.

TOCARTE LOS OJOS: Puede ser tentador rascarte los ojos con los dedos, sin embargo es una manera rápida de propagar los gérmenes. No sólo eso, sino que además puedes estar haciéndole daño a la piel. Frotarte los ojos de hecho puede crear desgarros microscópicos en el tejido (haciendo que el área de los ojos se envejezca más rápido), rompiendo los capilares de los párpados (causando pequeños vasos sanguíneos) o rompiendo los capilares bajo el ojo.

SENTARTE TODO EL DÍA: Muchos expertos afirman que “sentarse es muy parecido a fumar”, algo que no es una gran noticia para ti si te la pasas sentado más de 8 horas al día. Un estilo de vida sedentario puede aumentar el riesgo de diabetes y enfermedades del corazón, y es probable que además te lastimes la espalda.

LLEVARTE EL TELÉFONO AL BAÑO: La mitad de los usuarios de teléfonos inteligentes de edades de 18 a 29 admitieron llevar sus teléfonos con ellos para el inodoro, de acuerdo con una encuesta de 2013. Puede ser tentador, pero recuerda que hacer varias tareas a la vez te va a saturar y te va a hacer más ineficiente.