Tabúes de la lactancia materna
Lo que opinan las madres de las miradas que reciben cuando dan el pecho en público.
Sobre la crianza opina todo el mundo, aunque no se le pregunte. En internet, uno de los debates que genera cierta polémica es el de la lactancia materna en público, generador de multitud de artículos virales, ya sea por fotos reivindicativas, por tratar de normalizarlo o por acciones de madres agraviadas. También por reírse de las opiniones que esto genera.
Con motivo de la Semana Mundial de la Lactancia Materna -que la OMS recomienda en exclusiva hasta los seis meses-, hemos decidido preguntar a las protagonistas. Pero, ¿qué piensan las madres de las miradas que reciben cuando están amamantando a sus bebés?
Recogemos algunas de sus opiniones, entre más de 350 testimonios:
SORPRESAS AGRADABLES
- “Solo me he encontrado sonrisas y miradas tiernas cuando alguna vez he levantado la mirada y me la he cruzado con alguien”. (Virginia Ruiz)
- “Hay gente a la que le da apuro cuando te ve, pero en la mayoría de los casos yo no he sentido que sea porque les parezca mal sino por temor a molestarte. Normalmente si ven que tú les hablas les miras y te comportas con naturalidad se relajan ellos también”. (Mara Cañedo)
- “Lo único que me daba un poco de pena es la sorpresa de la gente cuando dejaba a uno y me ponía a otro… Jeje”. (Carmen Cazaña, madre de mellizos)
- “La gente me mira, pero la mayoría son señoras sonrientes a las que le hace mucha gracias que yo vaya caminando y dándole el pecho”. (Lola Martínez)
- “Lo más curioso fue una niña de 7-8 años que vino a preguntarme qué hacía, porque le pareció súper extraño. La pobre no daba crédito a que ‘por ahí’ saliera leche…”. (Silvia Carrandi)
SORPRESAS DESAGRADABLES
- “A mí básicamente me da igual que me miren o no (llevando fleco, más de 20 tatuajes, septum dilatado, lóbulos dilatados 3 cms...), acostumbrada estoy. Lo que me cae mal es que cuchicheen a gritos. Intolerable falta de respeto”. (Lidia Sevillano)
- “Alguna gente mira como si estuvieras haciendo algo malo, pero como ni lo comparto ni lo entiendo, no hago caso”. (Sonia Martínez)
- “Recuerdo como un/a familiar (prefiero no decir quién) cuando daba el pecho a su bebé, se plantaba delante de nosotros, se cruzaba de brazos y no parpadeaba para no perder detalle... Para mí era horriblemente incómodo... Hasta que un día me vi obligada a cortar la situación con una mirada fulminante”. (Jessica Cuenca)
- “¡Tenía amigos que cuando decía ‘tiene hambre’ salían huyendo!”. (Sandra Domínguez)
- “Que miren me da igual porque es una forma de normalizar la lactancia, aunque he de reconocer que me molesta un poco que la toquen o la entretengan (a su bebé) mientras, porque la distraen y la ponen nerviosa”. (María Jesús Alegre)
- “Un hombre no dejaba de mirarnos hasta que me cansé y le dije que si quería un poco, que tomara un vaso”. (María Sánchez Garrido)
- “Lo disfruto mucho, pero sí que es verdad que hay personas de mi entorno que no se atreven ni a mirarme cuando lo hago. Con los tiempos que corren. ¡Parece mentira!”. (Lola Promesas)
LO QUE HAY QUE OÍR
- “Me han llegado hasta a decir que, por favor, no dé el pecho en público. que puede ofender a los niños. Surrealista”. (Tania Menéndez)
- “Situaciones incómodas, solo una cuando un amigo que había bebido más de la cuenta empezó a gritar: ‘¿Cuándo le toca comer al bebé? Es que quiero verte las tetas’. Entonces llegué a la conclusión que muchos miran para ver tetas y no lo ven como algo natural”. (Susana Llobregat)
- “Al principio, cada vez que iba a dar el pecho al peque y estaba el abuelo, siempre me pedía por favor que me fuera a un lugar donde no me viera nadie. Yo creo que el pobre a la cuarta vez que me lo dijo y le dije que no me escondía a dar el pecho, sucumbió la intención”. (Soledad Delgado)
- ‘¿Otra vez? Eso es que no tienes leche’. ‘¿Se te duerme comiendo? Eso es que no tienes leche’. ‘¿No te aguanta las 3 horas? Eso es que no tienes leche’. ‘¿Llora? Eso es que tu leche es mala’. Es increíble que en 2015 aún no se haya entendido que la lactancia materna es 100% a demanda. (Griselda Calaf)
- “Sí que hay alguna mirada rara, pero yo les miro a ellos. Lo peor son los comentarios de gente cercana (...), parecen todas sacadas del mismo manual”. (Sonia Martínez)
- “He dado el pecho hasta los tres años (...). ¡Me llegaron incluso a llamar la atención en una playa! Una señora me preguntó si no me daba vergüenza darle teta a un niño tan grande”. (Chus Llabres)
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