Mueren 70 marranos en volcadura
Además hubo 3 personas lesionadas tardando 12 horas en el rescate
Los animales fueron sacrificados en el lugar y las autoridades de COEPRIS sin sus luces.
La volcadura de un camión que transportaba marranos dejaron como saldo a tres personas lesionadas y alrededor de sesenta marranos sacrificados y puesto a la venta por el dueño en pleno accidente vial.
El accidente sucedió ayer alrededor de las 01:30 horas en el Viaductos con avenida Las Torres, donde paramédicos de la Cruz Roja arribaron a dicha hora auxiliando y trasladando a un nosocomio a tres ocupantes de una camión propiedad de la S. P. A. Del Plan del Alazán.
La pesada unidad motriz se encontraba volcada a un costado de la cinta asfáltica con dirección de oriente a poniente que transportaba en un remolque jaula tipo animales porcinos, los cuales algunos murieron en el lugar tras el percance y otros se encontraba con vida, por tal motivo el personal de la empresa se presentaron en el lugar para retirar a los animales con vida esto prolongó los trabajos de rescate hasta doce horas.
El conductor fue identificado como Francisco Urgell Sánchez, de 28 años, residente de la colonia Satélite, quien manifestó que circulaba sobre el Viaducto de oriente a poniente a un velocidad moderada pero al tomar un pequeña curva el peso de la carga le ganó provocando que perdiera el control de la unidad motriz volcándose, al ser auxiliado dio aviso a su patrones.
Los encargados de la empresa manifestaron que en el remolque transportaban 250 marranos aproximadamente, de los cuales solo rescataron con vida a ochenta porcinos y murieron alrededor de setenta y cincuenta tuvieron que ser sacrificados en el lugar debido que no caminaban o tenían lesiones de gravedad, el resto le fue robado por automovilista que pasaban y huyeron en horas de la madrugada.
Resaltando que algunos automovilistas, carniceros y vendedores de carnitas aprovecharon el percance para hacer sus compras ya que el encargado de los animales comenzó a vender a los animales muertos y a los que sacrificaron en el lugar, sin la supervisión de otras autoridades como las COEPRIS a cargo de Armando Covarrubias Treviño o SAGARPA, los cuales fueron avisados sobre el suceso de la venta de los animales pero no se hicieron presentes.
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