No tiene madre

Jesús Guadalupe Medrano dijo no se percató de lo que hacía producto de las drogas que probó desde la noche anterior.

Joven desempleado sin oficio, ni beneficio entregado a las garras del vicio en sus tiempos de ocio, primero estranguló a su madre e hizo lo mismo con su abuela, a las cuales remató con un cuchillo y hasta les sacó los ojos, salvándose sus hermanos menores quienes en esos momentos se encontraban en la escuela. 

Los lamentables hechos que conmocionaron a la sociedad de Río Bravo, se registraron durante la mañana del martes en el domicilio marcado con el número 916 por la calle Fernando Montes de Oca de la colonia Niños Héroes.  

LOS HECHOS

De acuerdo a la información proporcionada a este medio informativo, los hechos se suscitaron cuando el padre del doble homicida salió a comprar pollo, fue cuando al encontrarse en su cuarto el ahora parricida, quien responde al nombre de Jesús Guadalupe Medrano, de 18 años, a quien minutos antes habían terminado de “barrer”, por presunta posesión por lucífer, atacó primero a la mamá y luego a la abuela a las cuales primero las estranguló para luego terminar la macabra obra, con un cuchillo cebollero, con el que literalmente las cosió a cuchilladas en diferentes partes del cuerpo, en lo que se convirtió en un verdadero festín de sangre que lo enloqueció al grado de sacarles los ojos.

LO SORPRENDE EL PAPÁ

Con el cuchillo que aún mantenía en la mano ensangrentado entró al cuarto su padre Jaime Medrano Gutiérrez, quien al percatarse de los hechos solicitó el apoyo de las autoridades no sin antes someterlo y amarrarlo de unos barrotes.

LAS AUTORIDADES

Al lugar de los hechos se dieron cita el agente segundo del Ministerio Público Luis Javier Rodríguez de la Rosa quien dio fe de los sangrientos hechos, el comandante de la Policía Ministerial del Estado Ernesto Escobar procediendo a detener al parricida, y el jefe de servicios periciales Mario Alberto Degollado Rodríguez quien con su equipo de trabajo levantaron todas y cada una de las evidencias del caso que aún se encuentran en proceso de investigación.

Es importante agregar que al dar fe de los hechos, en el caso de la madre no solamente yacía en el suelo cosida literalmente a cuchilladas, sino que tenía del short abajo, de ahí que el caso aún no está cerrado. 

LAS VICTIMAS

Los víctimas del brutal asesino respondían a los nombres de Amalia Palomares Alvarado quien contaba con 47 años y María de Jesús Alvarado Barbosa de 83 años, la primera quedó tendida en el suelo y la segunda en la silla de ruedas.