Convertida VNP en un muladar
Autoridades prácticamente hacen una invitación al turismo a no acudir con esa actitud de dejadez y abandono de su gente y de quienes hacen derrama.
Ofrece la Villa de Nuevo Progreso panorama denigrante al turismo y la comunidad en general, al persistir los montones de basura y baches en los principales accesos de la comunidad.
A unos cuantos pasos del puente internacional se sitúa la calle Reynosa que es de las más transitadas, misma que hoy en día causa tristeza y es motivo de vergüenza para quienes ahí residen ante los ojos de los visitantes, principalmente de los Estados Unidos al adolecer de una serie de carencias, que continúa evidenciando la pésima coordinación y atención de las autoridades a nivel comunitario, que no terminan por ponerse de acuerdo tan siquiera en cuanto hace a la recolección de la basura.
Es natural que de manera frecuente observar panoramas como montones de basura y moscas, además de los fétidos olores que despide el acumulamiento de los desechos, no obstante que es una de las calles que colindan casi con el puente internacional.
El panorama lo complementan la gran cantidad de baches que conforme transcurre el tiempo se ensanchan y profundizan, ante autoridades comunitarias indiferentes, que siguen sin escuchar ni atender las necesidades básicas que conforman una población, que demanda acciones inmediatas que le permitan mejorar el entorno en el que se desenvuelven y viven.
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