En el abandono la Benemérita

En el interior del inmueble de la Cruz Roja, se advierte una gran cantidad de polvo en los escritorios y archiveros.

Completamente abandonadas lucen las instalaciones de lo que fue la Cruz Roja de la Villa de Nuevo Progreso. El polvo lo cubre todo: escritorios, pasillos y camastros y además, se desconoce qué hicieron con un aire acondicionado que desaparecieron de una ventana.

Tal y como se puede apreciar en las gráficas, dicho lugar que se localiza a un lado del edificio de la delegación municipal de esa turística población, causa una pésima impresión a los visitantes, ante la complacencia de las autoridades estatales y nacionales de la benemérita institución. Fernando Suinaga Cárdenas, presidente nacional de la Cruz Roja Mexicana declaró al asumir dicho cargo:

“El poder dirigir a una de las instituciones más prestigiadas del país, incluso de un gran reconocimiento a nivel mundial, como lo es nuestra Cruz Roja Mexicana, representa un gran desafío, compromiso y responsabilidad, que con gran pasión llevaré a cabo”.   

Si este personaje tuviera a bien visitar la subdelegación de la Cruz Roja en Nuevo Progreso, constataría las deplorables condiciones en que se encuentra el inmueble que hubo un tiempo, estaba trabajando al 100 % en beneficio de los neoprogresenses. Mientras no lo haga, sus palabras serán solo eso, letra muerta que lo exhibe como falto de pasión para cumplir su gran desafío, compromiso y responsabilidad, que juró llevar a cabo. 

De hecho, en Nuevo Progreso, sus habitantes están faltos de atención por las tardes, pues el Centro de Salud sólo trabaja hasta las 15:30 horas de lunes a viernes, por lo que por las tardes noches, no hay quien los pueda auxiliar médicamente, provocando incluso que los enfermos sufran mayores males por la tardanza en encontrar el auxilio de un doctor, al trasladarse hasta esta cabecera municipal, distante a 25 kilómetros de esa localidad.

Por lo visto, para el presidente nacional de la Cruz Roja Mexicana, no existe la subdelegación Nuevo Progreso y sus discursos son sólo eso, palabras y, no le importa servir a la humanidad y aún así, se atreve a hablar de que quiere aumentar la recaudación de recursos económicos en las colectas nacionales.