Negligencia y abandono

Estas son las viejas instalaciones de Ferrocarriles Nacionales de México, ahora en manos extranjeras, gracias a la política de privatización de la empresa por parte de Ernesto Zedillo Ponce de León, presidente mexicano de 1994 al 2000.

Propietarios de la compañía extranjera ferroviaria que sustituyó a Ferrocarriles Nacionales de México, violenta la concesión que el Gobierno de México les otorgó por 50 años.

Tienen un foco de contaminación ambiental en las viejas oficinas de la estación de ferrocarril de la zona centro de la ciudad, donde existen todo tipo de alimañas, como ratas, arañas, cucarachas y tlacuaches. 

Como evidencia de que la privatización de las empresas que eran del pueblo de México, no siempre son positivas, como lo sugieren quienes han vendido el patrimonio nacional como parte del sistema neoliberal económico, quedan dichas instalaciones ubicadas en el crucero de la calle Tlaxcala con las vías férreas.

Fue el simulador demócrata, expresidente de México, Ernesto Zedillo Ponce de León, quien continuó la venta de empresas nacionales iniciada por su antecesor, Carlos Salinas de Gortari.

En el año 1995, siendo presidente, Zedillo notificó al pueblo de México, la privatización de Ferrocarriles Nacionales de México, aunque como siempre, con arreglos en lo ‘oscurito’ ya había concesionado la primera compañía en el año 1994, Transportación Ferroviaria del Valle de México, (TFM), la cual concesionó las líneas del noreste y parte del centro del país y, en 2005 cambió de nombre a KCSM. 

KANSAS CITY SOUTHERN DE MÉXICO: KCSM

De manera que desde dicho año, la KCSM, es la responsable del mantenimiento de las vías del ferrocarril y de las instalaciones de lo que fue Ferrocarriles Nacionales de México.

De acuerdo a la concesión otorgada, (50 años), KCSM es responsable de cualquier daño ECOLÓGICO y AMBIENTAL que cause desde o después de la fecha del inicio de sus operaciones.  Dicha empresa trasnacional, asumió la responsabilidad por la operación de los depósitos de abastecimiento y los talleres, así como de la supervisión de los proyectos de infraestructura, y del cumplimiento con cualquier ley o reglamento de protección ambiental actual o futura. 

KCSM también es responsable por el cumplimiento de las normas de eficiencia y seguridad estipuladas en la concesión, mismas que se basan en las normas de la Asociación Estadounidense de Ferrocarriles (“AAR”).

La concesión requiere que KCSM obtenga y mantenga vigentes pólizas de seguros de conformidad con los términos de la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario. Excepto en circunstancias específicas, KCSM es responsable de los daños causados a la carga que transporta, al igual que los daños causados a terceros como resultado de sus actividades. 

Por todo lo anterior, KCSM, es responsable del foco de infección que mantiene en sus viejas oficinas, máxime que se localizan en una zona poblada y frente a la plaza principal Benito Juárez y a unos metros de la primaria Francisco I Madero, por lo que cientos de niños y adultos que caminan por ese lugar, podrían verse afectados por la negligencia de los dueños de la empresa extranjera, a quienes no les interesa la seguridad de los mexicanos.