Escandalosos y ebrios terminan tras las rejas
Amanecidos y al calor de las copas se dedicaban a molestar a peatones y automovilistas que pasaban cerca de donde estaban
El conductor Gerardo Martínez Flores y sus amigos terminaron tras las rejas.
Once personas entre hombres y mujeres en estado de ebriedad que tripulaban una camioneta terminaron en las celdas al estar escandalizando y molestando a personas en la vía pública.
El arresto de los ebrios y escandalosos se registró a las 09:00 horas por Policías Estatales que realizaban recorridos de vigilancia en la calle Fundadores de la colonia Ayuntamiento, peatones y automovilista solicitaron el auxilio porque un camioneta Toyota negra tripulada por varios sujetos, estaban insultando a todos los que pasaran cerca de ellos y circulaban a exceso de velocidad la unidad motriz en ocasiones le cerraron el paso a otros vehículos.
Al ubicar dicho vehículo se le marcó el alto pero el automovilista se negó a detenerse intentando huir de las patrullas, al darle alcance se le cerró el paso solicitando a los tripulantes descendieron del vehículo pero éstos cuestionaron la acción y poniéndose agresivos, siendo sometidos y trasladándolos a la delegación, para ser llevados con el médico realizándose el alcoholímetro, arrojando que todos presentaban entre primero y segundo grado de ebriedad.
Las mujeres arrestadas fueron identificadas como Yadira Yahai Rodríguez Martínez, Berenice Rodríguez Martínez, María Escobar García, Alma Isela Hernández Lara, Dalia Elizabeth Pecina Huerta y Fabiola Lozano Aguilar, quienes terminaron tras las celdas en el momento que eran entrevistadas por el policía de barandilla, las primeras féminas eran la más alegadoras con los policías y dos jovencitas más se burlan de los uniformando posando sexy para la foto de archivo.
El conductor de la unidad motriz se identificó como Gerardo Martínez Flores expresaba que acababa de salir de un bar cercano donde estuvieron todos conviviendo pero se salieron porque su amiga Mary Escobar les dijo que su hija cumplía años e invitó a todos a un centro recreativo para continuar con la fiesta, pero ya no llegaron ya que los policías les agüitaron la pachanga.
DEJA TU COMENTARIO