De manera dramática los Coyotes consiguieron asegurar el primer juego de la serie de campeonato por pizarra de 11-10 sobre los Padrinos de Cabecita para de esta manera colocarse a un juego de obtener el título en el Torneo Nocturno de la Liga Federal Independiente de Softbol.
Los Coyotes estuvieron contra la pared al estar abajo por la mínima diferencia de 9-10, pero en el cierre del séptimo episodio Julián Castillo pegó batazo grande de cuadrangular solitario para emparejar la situación y posteriormente dejaron tendidos en el terreno de juego a Padrinos de Cabecita con pecado del parador en corto.
El trabajo del lanzador Benito Zúñiga estuvo sobre la línea de la derrota y victoria, pero fue esta última que consiguió gracias al aporte ofensivo oportuno de sus compañeros y de esta forma colocarse a un juego de llevarse el gallardete en el campo Ramiro Saracho.
Por su parte el serpentinero Antonio Hernández no tuvo un mal trabajo en detener por momentos el ataque de los Coyotes y cuando parecía que mandaba el juego a extrainning una pifia dentro del cuadro termino por llevarse el doloroso revés.