El atacante argentino de 23 años fue la bujía de la reacción del equipo Pep Guardiola en el partido del Grupo G, luego que el ghanés Osman Bukari adelantó a los visitantes para sorpresa generalizada en el estadio Etihad.
Rodri, cuyo gol ante el Inter de Milán en la final de la pasada temporada le dio al City su primera Copa de Europa, añadió el tercer tanto.
Guardiola quedó extasiado con el rendimiento de Álvarez al ponerle detrás de Erling Haaland en el ataque.