Ciudad de México
Las críticas de ministros del gobierno español y múltiples voces del mundo del fútbol arreciaron el lunes sobre Luis Rubiales, el presidente de la federación nacional de fútbol, por su conducta inapropiada al celebrar la victoria 1-0 de la La Roja ante Inglaterra en la final disputada el domingo en Sydney, Australia.
La Real Federación Española, que preside Rubiales, trató de minimizar el incidente al difundir primero una declaración atribuida a la jugadora que besó y luego publicó un video en el que Rubiales se disculpa.
En el palco e inmediatamente después de la victoria de España, Rubiales se llevó la mano a los testículos en un gesto triunfal, sin prestar atención a que la princesa Sofía, de 16 años, estaba a su lado. Luego, durante la ceremonia de premiación, Rubiales besó en los labios a la jugadora Jenni Hermoso, atrayendo la atención y amargando el festejo del día más glorioso del fútbol femenino español.