Guadalajara, Jalisco
Y llegó el día del último adiós.
Pedro “Perro” Aguayo, quien falleció el miércoles pasado a causa de un infarto, recibió ayer una última despedida por parte de sus familiares y amigos.
Poco antes de las 11:00 horas, el féretro del “Can de Nochistlán” arribó al Parque Funeral Colonias, en Guadalajara, donde se realizó una misa de cuerpo presente, a la cual se dieron cita 120 personas, aproximadamente.
La ceremonia religiosa fue oficiada por un sacerdote sobrino del “Perro” Aguayo, y auxiliada por otro presbítero, amigo de la familia Aguayo Ramírez.
Ambos sacerdotes exaltaron los valores humanos de Pedro Aguayo Damián, a quien se refirieron como un hombre de Dios, pacífico en su vida personal y un profesional dentro del cuadrilátero.
Una vez finalizada la misa, la familia Aguayo Ramírez agradeció el apoyo y compañía de los presentes.
El féretro de Pedro fue retirado de la iglesia entre aplausos, quienes siguieron el trayecto hasta el espacio que ocuparía el cuerpo, dentro del recinto funerario, mismo en el que descansa su hijo.