La selección neozelandesa inicia su camino en la Copa Mundial femenina el jueves con el duelo entre Nueva Zelanda y Noruega. El equipo conocido como The Ferns recibió el honor de abrir el torneo seguido de coanfitrión Australia ante Irlanda en Sidney.
"Espero que hayan muchas personas, no solo para nuestros juegos, pero para los demás. Es un torneo global y algo que nos entusiasma poder recibir. He estado esperando esto por años", admitió la defensa Ali Riley. "Espero que ahí se mantenga el entusiasmo y espero que tengamos una buena actuación".
La Federación de Nueva Zelanda anunció que el partido inaugural en el Eden Park en Auckland recibirá la mayor cantidad de aficionados para un partido de fútbol, que se estima será de 50.000 personas.
"Estuve en la final del Mundial 1999 en Los Ángeles y sé lo que eso me provocó como una niña. Entonces tener a la gente aquí, el ruido nos dará energía", comentó Riley, quien creció en California y juega para el Angel City.
"Pero también sé lo que puede hacer para las niñas, ver a las jugadoras, estas increíbles y empoderadas mujeres viviendo su sueño".