Atacan a balazos la familia del líder de autodefensas

La mujer y la hija de Bruno Plácido, dirigente histórico del movimiento de autodefensas de Guerrero, han denunciado un ataque a balazos en su contra este lunes, cuando se desplazaban de Acapulco, en la costa, a Chilpancingo, la capital del Estado

Ciudad de México

La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) ha informado de que el ataque no ha dejado heridos. En octubre, sicarios asesinaron a Plácido en Chilpancingo, a plena luz del día, un asesinato que permanece en la impunidad.


VIAJABAN A CHILPANCINGO

"Personal de la Policía Estatal proporciona seguridad y acompañamiento a Edilberta "N" con tres personas más", ha informado la SSP en un comunicado. "Esta atención se dio luego de que la mujer informara a los elementos estatales de que cuando circulaba sobre la Carretera Acapulco – Chilpancingo escucharon varias detonaciones al parecer de arma de fuego, motivo por el cual se regresaron en sentido contrario con dirección a la caseta de cobro La Venta, por lo que se les proporcionó la seguridad", ha añadido.

El grupo se trasladaba a Chilpancingo para participar precisamente en un evento por el caso de Plácido. El 18 de octubre, el activista, fundador de la Unión de Pueblos Originarios del Estado de Guerrero (UPOEG), viajó a la capital, a las oficinas de la Secretaría de Salud local. A eso de las 17.00, cerca de la puerta de entrada a la dependencia, pistoleros dispararon contra él, hiriéndolo de muerte.

El asesinato de Plácido ilustraba la decadencia de la UPOEG en los últimos años, alejada de los postulados que impulsó. Parte original de la CRAC, el primer grupo autodefensa del Estado, Plácido impulsó una nueva policía comunitaria, la UPOEG, convencido de que la CRAC, que había nacido antes de las grandes olas de violencia de la primera década de siglo, no se estaba adaptando a los nuevos tiempos. Así, la UPOEG se convirtió en uno de los primeros grupos de autodefensas modernos en México, casi al mismo tiempo que los de Michoacán, allá de la mano de José Manuel Mireles e Hipólito Mora, este último asesinado igualmente el año pasado.


SE EXPANDEN EN LA SIERRA

En pocos años, la UPOEG se expandió por la zona serrana de la región de la Costa Chica y por el litoral. La Unión llegó incluso a comunidades de la región Centro, cerca de Chilpancingo. Las luchas de poder entre comandantes del grupo y el empuje del crimen organizado acabaron, sin embargo, por destruirla. El caso más evidente del declive de la UPOEG era la desaparición del activista Vicente Suástegui, en 2021, cerca de Acapulco. Aunque nunca se pudo demostrar, mucha gente apuntó integrantes de la UPOEG en la zona.