Golpe al cártel de Sinaloa en España

Un emisario del grupo criminal mexicano y cuatro ´narcotransportistas´ subcontratados, que iban a trasladar la droga al norte de Europa, han sido detenidos en las provincias de Alicante y Valencia

España

¿Por qué comprar un electrodoméstico en la península para llevarlo a Canarias, si en el archipiélago son más baratos al soportar impuestos más bajos? El sospechoso envío de dos lavadoras desde Madrid a Tenerife ha permitido a la Policía Nacional asestar dos importantes golpes al narcotráfico en poco más de un año. El primero, más humilde, la intervención a principios de 2023 de 24 kilos de cocaína que iban ocultos, precisamente, en esos dos enseres enviados a la isla. El segundo, fruto de seguir el rastro dejado por aquella aprehensión, de mucha más relevancia: la incautación el pasado 6 de mayo en la comunidad valenciana de 1.800 kilos de metanfetamina, la mayor aprehensión de esta droga de síntesis en España y la segunda en toda Europa.

EFECTO DESTRUCTIVO

Este cargamento de metanfetamina estupefaciente que los expertos catalogan como uno de los que tienen efectos más destructivos, sólo por detrás de la heroína y el crack- pertenece, supuestamente, al cartel de Sinaloa, la peligrosa organización mexicana, cuyo máximo cabecilla fue Joaquín "El Chapo" Guzmán, actualmente preso en EU, donde fue condenado a cadena perpetua. El destino final de la droga, sin embargo, no era España, donde su consumo es minoritario, sino el norte y el centro del Europa, según han explicado este jueves en rueda de prensa los mandos policiales responsables del operativo. Las casi dos toneladas de estupefaciente aprendidas podrían haber alcanzado en el mercado negro un valor de "varias decenas de millones de euros", según las primeras estimaciones policiales.

OPERACIÓN SAGA

En la bautizada como operación Saga han sido detenidas cinco personas en Villena (Alicante) y Puçol (Valencia), aunque la policía no descarta que se produzcan próximamente más arrestos. Entre los capturados se encuentra, precisamente, un presunto integrante del cartel de Sinaloa. Según ha detallado la Policía Nacional, este ciudadano mexicano había sido

enviado a España como emisario para confirmar la llegada y posterior distribución de la metanfetamina , también conocida como meta o cristal,- a Alemania, Países Bajos, Reino Unido y Polonia. Los otros arrestados son tres hombres y una mujer de nacionalidad española y rumana, que habían sido subcontratados por el cartel como "narcotransportistas" para hacer llegar a su destino final el estupefaciente, según ha explicado el comisario Antonio Martínez Duarte, jefe de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Policía Nacional.

PROCEDE SUPUESTAMENTE DE MÉXICO

La metanfetamina procede, supuestamente, de México, donde se encuentran los mayores laboratorios clandestinos para su fabricación, pero los responsables policiales han eludido detallar cómo había entrado en España, ya que la investigación continúa abierta. La incautación se precipitó a principios de mayo después de que los investigadores detectaron que una furgoneta sospechosa acudía a un chalé situado en una pedanía apartada de Villena que era vigilado desde hace tiempo como posible almacén de droga. Tras permanecer en el lugar hora y media, el vehículo abandonó la finca. Cuando le dieron el alto al sospechar que podía transportar una partida de estupefaciente, los agentes encontraron en su interior dos compresores hidráulicos que, además de ocultar en su interior parte de la droga, permitían el acceso al doble fondo de la furgoneta, donde se ocultaba más paquetes de metanfetamina. En total, la policía intervino en el vehículo 224 kilos de esta droga de síntesis.

DETALLAN ENTREGAS

A los ocupantes del vehículo, la policía también les intervino un billete de cinco euros con determinadas marcas -llevaba escritas la fecha y la cantidad a entregar- que iba a hacer la función de token o señal para los receptores. Tras el hallazgo, los agentes procedieron a registrar cinco domicilios en Puçol (Valencia), donde residían los supuestos narcotransportistas, y el chalé de Villena. Allí, la UDYCO encontró el resto del alijo, casi 1.600 kilos más, que los narcos no se habían molestado en ocultar. Se encontraba a la vista distribuido en cajas y recipientes rígidos de plástico, como túperes, para que los cristales en los que se presenta la metanfetamina no se rompieran, ya que a mayor tamaño precio más alto en el mercado negro.