BUENAVISTA, Mich.
Falsos autodefensas intentaron levantar en armas al pueblo de la Tenencia Felipe Carrillo Puerto (La Ruana), pero no tuvieron convocatoria.
Sujetos identificados con una organización criminal, armados con rifles de alto poder, tomaron por la iglesia de esa localidad del municipio de Buenavista, Michoacán e hicieron sonar las campanas. Lo anterior, para convocar en la plaza principal a la ciudadanía e incitarla a levantarse en armas, como ocurrió el 24 de febrero de 2013.
Los hombres fueron acompañados de Guadalupe, hermano de Hipólito Mora, exlíder de las autodefensas, asesinado el pasado 29 de junio.
El padre Ricardo Fortino Rodríguez Franco, párroco de la iglesia de esa tenencia de Tierra Caliente, denunció la irrupción de los sujetos armados a la iglesia de Guadalupe.
"Les informo que nuevamente se nos metieron a tocar las campanas sin mi consentimiento y he tomado la medida de cerrar tanto el templo, como toda la parroquia. Mil disculpas; ojalá se entienda de por qué está todo cerrado", dijo el sacerdote, en un video.
A unos pasos, hombres vestidos de negro y acompañados de Lupe Mora realizaban un pronunciamiento en la plaza principal, pero sin respuesta de la población.
Luego de incitar desde el sonido local a los pobladores, un dron cargado de explosivos cayó sobre la techumbre del lugar donde se realizaba "el mitin".
El estruendo de la explosión quedó grabado en otro video y en una fotografía se aprecia el boquete que dejó el explosivo, donde incluso había militares y Guardia Nacional.
Los hombres que encabezaron ese hecho son nativos de esa localidad y muchos de ellos, incluso, habían sido expulsados por los propios habitantes y las autoridades.
Los hombres fueron identificados como: Francisco Valencia Díaz, "El Soquete"; Jesús García Chávez, "El Chuchín" y Antonio Naranjo.
Corporaciones federales de seguridad ubican a "El Chuchín", como el principal responsable de esta sedición criminal.
Los informes refieren que ese grupo liderado por Jesús García, es financiado por líderes regionales del Cártel Jalisco Nueva Generación, desde el municipio de Aguililla.
Los reportes indican que la intención de ese grupo armado es arrebatarle ese poblado a sus antagónicos, Los Viagras, quienes tienen el control de esa tenencia.
Más tarde, personal militar se desplegó en esa población de Tierra Caliente, donde los habitantes ya no salieron de sus casas.