Joe Biden ha ganado en Wisconsin por 20.000 votos y Michigan por 60.000, dos triunfos ajustados que le dan 26 electores en su carrera hacia la Casa Blanca. El avance del demócrata en Estados clave -está cerca de quedarse con Michigan y da batalla en Pensilvania-, ha activado la estrategia judicial de Donald Trump.
El presidente ha pedido a los tribunales que vuelvan a contar los votos en Wisconsin y que detengan el escrutinio en Michigan, donde ahora pierde por 0,7 puntos, con el 94% de las mesas escrutadas, y también en Pensilvania. Trump ha cumplido con su amenaza de la noche electoral, cuando se declaró ganador.
“Hemos presentado una demanda ante la Corte de Michigan para que se detenga el conteo hasta que se nos permita un acceso efectivo al proceso de escrutinio”, ha anunciado el equipo de campaña del presidente.
Joe Biden ha respondido a Trump esta tarde: “No estoy aquí para declarar que hemos ganado, pero cuando acabe el escrutinio creo que vamos a ganar”, ha dicho. El demócrata se ha convertido ya en el candidato presidencial más votado de la historia de Estados Unidos con 70 millones de votos. La última marca era de Obama, con 69,4 millones, en 2008.