egular, no prohibir, con ese argumento la Asociación Nacional de Industriales del Plástico (Anipac) y los Industriales de Bolsas Plásticas de México (Inboplast) pidieron al gobierno de la Ciudad de México reconsiderar la prohibición de las bolsas de plástico, en vigor desde el pasado 1 de enero.
En ese sentido el presidente de la Anipac, Aldimir Torres aclaró en conferencia de prensa en un hotel de Paseo de la Reforma que como asociación no promoverán amparos o recursos legales en contra de la prohibición, pues no pretenden revertir el veto a las bolsas de plástico, pero sí buscan que se haga una regulación basada en normas técnicas oficiales, las cuales están pendientes de publicación.
El directivo advirtió que en caso de que no se dé una prórroga para la implementación del veto a las bolsas de plástico, las 141 empresas en la Ciudad de México dedicadas a la fabricación de bolsas de plástico podrían cerrar el año con números rojos, pues a la fecha operan al 20 por ciento de su capacidad.
“Prohibir es quedarse cruzado de brazos, es hacerse a un lado, es pararse de la mesa. Generemos normas, entender que la normatividad, la regulación es el camino adecuado para ello. Vamos por una regulación que sea técnica, responsable e incluyente, la industria no está cruzada de brazos, está dando la cara para reducir los impactos (ambientales) que hoy tenemos”, comentó el presidente de la Anipac.
Para el presidente de la sección de Fabricantes de Bolsas de la Anipac, José del Cueto, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) cometió un error a prohibir las bolsas de plástico sin antes tener una Norma Oficial Mexicana para regular los plásticos compostables y otra de bolsas reutilizables, pues de esta forma podrían ofrecer otras alternativas.
Ante ello sugirieron que se pause el veto a las bolsas de plásticos en tanto se realiza un rediseño de las bolsas de plástico de acarreo para que sean reutilizables, 50 por ciento de material reciclado y sean 100 por ciento reciclables, lo cual se haría a través de una norma técnica y de un plan de manejo.
Del Cueto comentó que se podría seguir un plan similar al de California, Estados Unidos, donde en 2014 se dio una regulación que prohíbe la entrega de bolsas de un solo uso, no sólo las de plástico, pero se cobra un mínimo de 10 centavos por cada bolsa certificada que cumple con los requisitos de ley como tener 20% de material reciclado.
Además, abundó que como parte de esta regulación de California los fabricantes de bolsas de plástico tienen que certificarse de manera bianual y la autoridad mantiene un registro de los fabricantes debidamente certificados.
No hay marcha atrás
Dos horas antes de la conferencia en la que los industriales del plástico dieron su postura, diputados y diputadas del Congreso de la Ciudad de México ofrecieron una conferencia de prensa en donde dejaron claro su posicionamiento: no habrá marcha atrás en la prohibición de la entrega, comercialización y distribución de bolsas de plástico en la capital.
“Ante la ola de declaraciones de la industria del plástico donde defiende sus intereses económicos queremos decirles que esta reforma no va marcha atrás (…) La industria ha tenido tiempo suficiente para crear alternativas ¿por qué no han creado nuevas alternativas”, dijo la diputada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Alessandra Rojo de la Vega.
Esta postura fue secundada por el director del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), Gustavo Alanís, quien comentó que el acatar las leyes no es opcional, por lo que exhortó al Congreso capitalino a mantenerse firme en lo que legislaron y al gobierno central pidió llevar a cabo actos de autoridad para cumplir el veto a las bolsas de plástico.
De su lado la Sedema informó que la Dirección General de Evaluación de Impacto y Regulación Ambiental y la Dirección General de Inspección y Vigilancia Ambiental ha realizado vistas a diversos establecimientos para constatar que se acate la prohibición de entrega, distribución y comercialización de bolsas de plástico.
“El propósito de estas visitas de inspección es informar y concientizar a la ciudadanía sobre la prohibición y los beneficios ambientales. El 21 de enero, personal de la Sedema visitó 38 tiendas de la plaza comercial Perisur y corroboró que la mayoría está cumpliendo con la disposición”, indicó en un comunicado.
“Un total de 34 tiendas respetan la normatividad y entregan bolsas de tela y otros materiales sustentables. Únicamente cuatro tiendas fueron apercibidas debido a que entregaban a la clientela bolsas de plástico desechables, incluyendo una con la leyenda biodegradable, que tampoco están permitidas”, abundó.