Ciudad de México
Fernando Medina, alias El Tiburón, que se hizo conocido en 2023 por pegar una paliza al empleado de un restaurante de comida rápida en San Luis Potosí, ha sido asesinado a balazos este lunes en esta misma localidad. Conocido como el "agresor del Subway", el hombre ha sido tiroteado a las afueras de su gimnasio de artes marciales, según apuntan los medios locales.
MORTAL ATAQUE
La víctima ha sido atacada mientras se marchaba de su gimnasio en la colonia General I. Martínez, al sur de la capital potosina. Medina, que trataba de llegar a la camioneta que tenía aparcada, recibió siete disparos de un arma, según ha declarado la Guardia Civil Estatal al medio de noticias Pulso de San Luis Potosí. El cuerpo capitalino fue el primero en acudir al lugar del asesinato, hasta que varios agentes de la Fiscalía estatal se trasladaron hasta las afueras del negocio de la víctima. De momento, la entidad de justicia potosina no ha dado información sobre el asesinato.
"El agresor del Subway", que era experto en artes marciales, se hizo conocido en julio de 2023 por golpear brutalmente al empleado de 15 años de un establecimiento de comida rápida en San Luis Potosí. Gracias a una cámara de seguridad del local se pudo ver como la víctima, que en ningún momento intentó defenderse, recibía los duros puñetazos de Fernando. Tras dejar a su víctima en el suelo, se ve como El Tiburón le dice algo al chico y sale de la cocina del establecimiento, mientras que los compañeros de trabajo del joven cierran la puerta y tratan de ayudarlo.
PROVOCAN REVUELO
El vídeo provocó un gran revuelo en redes sociales, lo que movió a la Fiscalía del Estado a activar una orden de búsqueda contra Fernando. Tras las primeras imágenes en el Subway, salieron a la luz otras grabaciones en las que se ve como Fernando aprovechaba sus conocimientos en artes marciales para agredir a sus víctimas con excesiva brutalidad. Tras estar varios días escondido de la justicia, El Tiburón fue finalmente detenido el 5 de agosto del pasado año. El gobernador de San Luis Potosí llegó a hacerse eco del caso al prometer que habría "justicia para Santiago", el chico al que Fernando había agredido. Tras estar en prisión preventiva, la defensa del agresor consiguió que no fuera acusado de tentativa de homicidio y salió de la cárcel en diciembre del año pasado.