CIUDAD VICTORIA, TAM.- Un total de cinco mil 605 accidentes de tránsito han tenido lugar en Tamaulipas de enero a la primera quincena de diciembre, asimismo la Secretaria de Salud federal a través del Boletín epidemiológico nacional, informa que ya son 952 los peatones que han resultado lesionados.
Entre las causas de los accidentes de tránsito el uso del celular al conducir, el consumo de alcohol y la distracción son las principales causas de accidentes mortales.
La la mayor parte de los accidentes de tránsito y sus consecuencias mortales están relacionados con el consumo de alcohol sobre todo en temporadas vacacionales y la navidad.
Así lo documenta la Secretaría de salud a través del Departamento de Salud Mental y Adicciones de la Secretaría de Salud cargo de la doctora Soraya Sanchez Diez de Pinos.
Se hace un exhorto a la colectividad para prevenir la ingesta inmoderada de alcohol en la presente temporada navideña, ya que es de conocimiento público que es tiempo de fiesta y diversión, sin embargo todo debe de hacerse con conciencia y responsabilidad, sobre todo en los menores de edad y los jóvenes ya que son el sector poblacional que más peligro enfrenta.
En este marco de referencia se resaltan los efectos que se tienen al combinar el alcohol con el volante:
Los efectos del alcohol sobre el organismo humano son de sobra conocidos. El alcohol produce una ‘depresión’ no selectiva del sistema nervioso central: deteriora la función psicomotora, la percepción sensorial (vista y oído), modifica el comportamiento de la persona, etc.
En relación con la conducción de vehículos, sus efectos pueden clasificarse en tres grandes grupos:
EFECTOS SOBRE LA FUNCIÓN PSICOMOTORA Y SOBRE LAS CAPACIDADES DEL CONDUCTOR
Está perfectamente demostrado que el alcohol deteriora marcadamente la función psicomotora y la capacidad para conducir con seguridad.
EFECTOS SOBRE EL COMPORTAMIENTO Y LA CONDUCTA
El alcohol produce un efecto de “sobrevaloración” que unido al marcado deterioro de las funciones cognitivas y psicofísicas, de lo que muchas veces el conductor no es consciente, induce frecuentemente una sensación subjetivo de mayor seguridad en uno mismo, lo que ocasiona un mayor riesgo de accidente.
Por otra parte, el alcohol puede alterar la conducta-comportamiento, y bajo sus efectos no son infrecuentes las reacciones de euforia, agresividad, conductas temerarias, etc.