Construyen canal por cuenta propia

Sin maquinaria realizan el trabajo en la ribera del Champayán para tomar el vital líquido

Altamira, Tam.

Ante la desesperación de no contar con agua ni para consumo humano, habitantes del ejido ribereño, Mata del Abra, se vieron en la necesidad de construir con picos y palas un canal de poco más de dos kilómetros para poder tener agua.

Los pobladores se organizaron para hacer las labores de "sol a sol" para la construcción del canal de unos 80 centímetros de ancho, y con un pequeño declive para hacer llegar el agua hasta la comunidad.

Jorge Saldaña, uno de los habitantes de ese sector, señala que están prácticamente incomunicados y el agua que tenían simplemente se acabó.

Sin una sombra en dónde resguardarse del sol, simplemente con sombreros, los residentes de esa zona ejidal iniciaron, desde finales de la semana pasada, la difícil tarea para poder contar con agua.

Señalan que ellos cuentan con la laguna para poder desplazarse en lanchas, además de todas las actividades necesarias para la subsistencia.

Pero desde hace un mes la laguna se secó y el río bajó de nivel a grados inesperados.

El canal que desarrollaron está desde la orilla del poblado ejidal, hasta la zona del río Tamesí, justo en donde está fluyendo el agua proveniente del nacimiento de El Mante.

La dificultad para la construcción del canal de forma manual fue con extrema problemática y peligrosidad, toda vez que se trata de fango en el que al pisar fácilmente la gente se hunde, teniendo el temor de alguna fosa que supere la estatura regular humana.

El lunes lograron concluir el canal, con el que ahora ya cuentan con agua para las necesidades básicas.